La prescripción de medicamentos genéricos ha abierto un nuevo mercado que va de la mano de la creatividad. El primero en dar el paso ha sido el estudio murciano Mentedementa, que ha diseñado ´envases genéricos para medicamentos genéricos´, como ellos mismos explican la iniciativa Farmabox.

La idea surgió de dos jóvenes farmacéuticos murcianos, Iria Rodríguez y Pablo Lomo, quienes se dieron cuenta de que los medicamentos genéricos, pese a servir para lo mismo, tienen envases de colores distintos, lo que hace que los pacientes se confundan, en demasiadas ocasiones, a la hora de tomar la medicación. Así, buscaron la colaboración del estudio de diseño Mentedementa, formado por Ángeles Madrid y Javier Jiménez, con la idea de crear el Universo Farmabox.

Esta iniciativa pretende innovar en el modelo de dispensación por principio activo, haciéndolo más accesible a los usuarios. Sus responsables afirman que «se trata de un proyecto de atención farmacéutica que resuelve los problemas de la prescripción» y se plantean la cuestión de si químicamente muchos de estos fármacos son iguales, por qué no lo son también en apariencia.

Para ello han diseñado una funda genérica para envolver los medicamentos que se divide en seis grupos: antibióticos (amarillo); protectores de estómago (verde); sistema cardiovascular (rojo); sistema metabólico (naranja); analgésicos (morado); y sistema nervioso (azul). Ángeles Madrid explicó a LA OPINIÓN que el envase también incluye las diversas patologías en las que se pueden usar estos fármacos, como puede ser el colesterol o el azúcar, así como las dosis que hay que tomar y la duración del tratamiento que debe seguir el paciente.

La iniciativa fue presentada el pasado mes de marzo en Infarma, el Congreso Europeo de Farmacia, Medicamentos y Parafarmacia y tuvo una gran aceptación, según reconoció Madrid. El éxito de Farmabox hizo incluso que dos laboratorios farmacéuticos se hayan interesado en este envoltorio, que se comenzará a utilizar antes del verano en un proyecto piloto en el que participarán cuatro farmacias (tres de Murcia y una de Torrevieja). De funcionar bien se extenderá al resto de España.

La idea es que estos cartones sean regalados por el laboratorio a las farmacias, para que los boticarios se los den a los clientes con cada nuevo envase. Por lo que son los laboratorios los que deben involucrarse en esta iniciativa, algo que Ángeles Madrid no ve muy difícil, ya que lo pueden dar como un producto más de ´merchandising´ –regalos publicitarios o promocionales–, en lugar de bolígrafos u otra cosa. Otra de las ventajas de Farmabox es que este producto se adapta a todos los envases de medicamentos del mercado con tiras envolventes de cartón que cubren la caja. Una gran idea que pronto estará en el mercado.