El consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, sigue pensando que las desalinizadoras son inservibles, pese a que la Unión Europea ha exigido a España que utilice y aproveche al máximo estas infraestructuras financiadas, en parte, con dinero europeo.

«Para utilizar una cosa, debe haber demanda. Y en este caso no las hay, porque al menos para la agricultura el agua desalinizada no sirve, porque es muy cara, un agricultor no puede pagar a a 1,20 euros el metro cúbico», señaló el responsable regional de Agricultura, para quien la UE «debería de haber frenado a Narbona [Cristina, ministra de Medio Ambiente en el primer gobierno de Zapatero] cuando se cargó por decreto toda la historia de planificación hidrológica de España y nos impuso por narices estas desalinizadoras. Ha sido una auténtica ´Atila hídrica´, pero no sólo para la Región, sino para toda España».

Cerdá comparó las desalinizadora con los grupos electrógenos, porque «estos te valen cuando no tienes electricidad, pero en el momento en el que llega la luz, se apagan automáticamente». Así, cree que pueden ser utilizadas como apoyo en situaciones extremas de sequía, pero no ser la fuente fundamental de suministro hídrico para nuestra cuenca». De esta forma. el consejero también recordó el ejemplo de Santa Bárbara (California), donde se construyeron desalinizadoras para una situación puntual de sequía pero luego se desmontaron y se vendieron a los árabes. «Hoy no creo que estas de aquí de Murcia se puedan ya ni vender» señaló. «No teníamos problema ya con la falta de agua para ahora tener estas máquinas ahí paradas», dijo.