Tras la tímida recuperación exhibida en 2010, el mercado laboral presentó un balance muy desfavorable en 2011 según la Encuesta de Población Activa (EPA) que elabora el INE. De hecho, la tasa de paro alcanzó el máximo de la serie histórica hasta situarse en el 26,8% de la población activa.

El número de parados en la Región de Murcia roza ya las 200.000 personas (199.100), en tanto que en el agregado nacional se ha superado los 5 millones de parados (5.273.600).

En este sentido, se destruyeron más de 600.000 empleos a lo largo del año pasado en España y 15.900 en la Región de Murcia. Ello supone un ritmo de destrucción de empleo del 2,8%, tasa menos desfavorable que la registrada en el ámbito nacional (-3,3%).

En comparación con el trimestre anterior el empleo cae un 2,6% y el paro aumenta un 11,6% en la Región de Murcia. Cifras superiores a las acaecidas en el ámbito nacional que presentó una caída del 1,9% en el número de ocupados y un incremento del 5,9% del desempleo.

Solamente Agricultura mejora la ocupación

En un análisis por sectores, Agricultura ha sido el único con un balance positivo en términos de empleo, y ello pese a las dificultades que ha tenido que afrontar a lo largo del año (crisis de la E.Coli, escasez de lluvias,…). En el último trimestre, se han creado en el sector 10.700 puestos de trabajo netos, lo que le permite cerrar el año con 7.300 ocupados más que en 2010.

Por su parte, Servicios no ha sido capaz de mantener el impulso que había mostrado en los trimestres centrales del año, y en el cuarto pierde 12.700 ocupados, para dejar el empleo en una cifra similar a la existente en el mismo periodo de 2010.

En cambio, los dos sectores restantes destruyeron empleo en 2011. En particular, Industria (-1.200 ocupados en el trimestre, -2.000 en el año) acusó la debilidad de la mayoría de sus ramas de actividad, mientras que Construcción (-11.100 y -21.300 respectivamente) sigue muy lastrada por la paralización de la variante residencial y la significativa minoración de la obra pública, mostrando tasas de destrucción de empleo similares incluso a las del inicio de la crisis.

El empleo femenino, el más afectado por el aumento del paro

El aumento del paro en 2011 afectó más a mujeres (+10.800 paradas) que a hombres (+1.700), mientras que por edades, la ocupación solamente mejoró en la cohorte de entre 25 y 54 años (+3.400 ocupados), con caídas entre los jóvenes menores de 25 años (-8.700) y los mayores de 55 (-10.500).

El empleo entre el colectivo extranjero aumentó en 1.000 personas a lo largo de 2011 y el paro se redujo en 6.700. Ello redunda en que el número de activos foráneos se haya reducido en 5.700 personas en el último año. Esta circunstancia podría explicarse por el abandono del país, por parte de muchos inmigrantes, ante la falta de expectativas laborales.

La tasa de temporalidad se redujo más de dos puntos hasta situarse en el 32,8%. Esta reducción no evita que continúe el diferencial respecto a la media nacional (24,4%).

La creación de empleo debe ser la máxima prioridad

En definitiva, el balance de 2011 en términos de empleo ha sido muy desfavorable. De hecho, la evolución del último trimestre es acorde con la entrada en recesión de la economía española y murciana que adelantan el resto de indicadores. Con ello, queda patente que la creación de empleo debe ser la máxima prioridad.

Evitar que la recesión se prolongue en los próximos trimestres dependerá de factores internos, entre los que cobra especial importancia el pago de la deuda que las AA.PP mantienen con las empresas. Además, los acuerdos alcanzados entre sindicatos y CEOE favorecerán que el ajuste no continúe produciéndose por la vía de la destrucción de puestos de trabajo. Dichos acuerdos deben ser complementados por una reforma laboral ambiciosa que favorezca la contratación a las empresas y estimule la iniciativa emprendedora.

No obstante, sin ocultar la necesidad de políticas que generen estímulos desde el ámbito nacional y regional, la coyuntura económica y laboral estará condicionada por las políticas desarrolladas en el ámbito de la Unión Europea y la zona del euro.