La crisis económica ha abocado al cierre a más de nueve mil empresas de la Región desde el año 2008, la mayoría del sector de la construcción. Murcia lidera así la caída empresarial en España en los últimos tres años, con la pérdida del 18,4% de las empresas afiliadas a la Seguridad Social, seguida muy de cerca por la Comunidad Valenciana, con una tasa del 16,8%.
Así se desprende del informe ´¿Cuántas empresas se ha llevado la crisis?´, elaborado por la escuela de negocios Esade, que asegura que esta caída «está estrechamente relacionada con la debacle del sector de la construcción, el primero en ser golpeado por la crisis», en el Levante español.
De las 100.075 empresas registradas en la Seguridad Social a finales de 2008, se pasó en 2011 a 90.856, es decir, un 9,2% menos, que se traduce en el cierre de 9.219 sociedades en sólo tres años.
De la directa vinculación de la crisis de la construcción con la pérdida de tejido empresarial en el Levante español da idea, asimismo, el hecho de que, aunque todas las comunidades autónomas, sin exclusión, registran descensos en el número de empresas afiliadas a la Seguridad Social, son las regiones del norte de España, las más alejadas del boom inmobiliario del Mediterráneo, las que menos han sufrido este bajón. Destacan, en este sentido, País Vasco, Navarra, Galicia y Asturias, todas en o por debajo del 7% de pérdida de empresas, menos de la mitad que en Murcia.
La otra cara de la moneda la constituyen las empresas sin asalariados que, no sólo no han visto mermada su presencia en la Región, sino que han logrado aumentar su número en un 0,7% (329 más), pasando de las 46.801 registradas en 2008 a las 47.130 del pasado año.
El estudio incide en esta singularidad y destaca que «aunque las empresas grandes parecen resistir mejor a la crisis, por lo que a empresas registradas en la Seguridad Social se refiere, el espíritu emprendedor de miles de autónomos estaría mitigando, en parte, la destrucción de empresas, especialmente en aquellas comunidades autónomas con más tradición en este tipo de empresa».
En general, la crisis se ha llevado por delante en España, desde 2008, a 177.336 empresas, la mayoría pymes, mientras que las grandes han demostrado su capacidad de supervivencia. En cifras absolutas, el número de empresas que ha perdido la economía española desde el inicio de la crisis se eleva a 177.336. Esta es la diferencia entre las empresas inscritas en la Seguridad Social en diciembre de 2007 y en octubre de 2011.
También a nivel nacional, el descenso más importante de empresas se ha centrado en el ámbito de la construcción, que han pasado de 246.271 en 2006 a 152.562 en 2010, lo que supone una caída del 36,8 %. Por detrás, se encuentran el sector industrial al pasar de 145.564 a 122.984 (un 15% menos), y el de servicios, de 1.005.678 a 956.267 (un 3,6% menos), según datos del ministerio de Trabajo, que calcula en un 10,5% el descenso de empresas por sectores entre 2006 y 2010.
La crisis inmobiliaria se traduce también en descensos del 23,7% para la construcción de edificios y del 20,8% para las actividades de construcción especializadas, lo que contrasta con la parte de actividad relacionada con el sector servicios al aumentar las actuaciones inmobiliarias en un 5,2%.
El artículo apunta que, probablemente, este incremento de las actividades inmobiliarias tiene que ver con la necesidad «imperiosa» de vender el remanente de vivienda construida.
