Una denuncia anónima entregada en la Jefatura Superior de Policía de Murcia, que fue incorporada a las diligencias abiertas sobre el "caso Zerrichera", alertaba sobre presuntos casos de corrupción urbanística en Águilas y ofrecía numerosos datos sobre la "interrelación existente" entre los integrantes de una supuesta "trama".

El documento, al que ha tenido acceso Efe tras levantarse el secreto de las actuaciones judiciales, consta de un informe acerca de las actividades supuestamente irregulares desarrolladas por una quincena de personas, entre las que se encuentran políticos, constructores, funcionarios y otros.

Igualmente, contiene un reportaje integrado por más de treinta fotografías en las que se denuncian presuntos casos de exceso de edificabilidad, realización de obras sin licencia, daños a la naturaleza y otros.

Finalmente contiene un apartado sobre las comparecencias del exalcalde de Águilas, Juan Ramírez, en los Juzgados cuando acudió a prestar declaración como imputado en el "caso Zerrichera".

Este asunto trata de esclarecer la presunta corrupción existente en torno a la recalificación de estos terrenos que fueron adquiridos por el promotor Trinitario Casanova en diez millones de euros en 2004 y vendidos apenas un año después en 105 millones de euros.

La Jefatura Superior de Policía de Murcia presentó la denuncia -recibida en agosto de 2009- en el Juzgado de Instrucción de Murcia que investiga el citado caso.

En el escrito de remisión se hacía constar que "la dirección del remitente es falsa, por lo que no se ha podido contactar con dicha persona".

El sobre con la denuncia anónima, enviada a la Policía por correo ordinario, aparecía remitido por las iniciales "F.A.D.A." y figuraba como dirección una calle de Águilas, sin número.

El documento, según han indicado a Efe fuentes de la investigación, parece haber sido redactado con las aportaciones hechas por varias personas, dada la amplitud de datos que se contienen en el mismo y la variedad de lugares, sociedades, empresas y actividades a las que se hacen referencia en el mismo, de imposible conocimiento por un solo autor.

El escrito facilita a los agentes números de teléfonos móviles de las personas a las que se sugiere se investiguen, direcciones, parentesco entre ellas -a veces, incluso hasta grados lejanos- apodos con los que son conocidos en la localidad, vínculos con funcionarios, influencias, etc.

Se indica también aquellos que estarían dispuestos a declarar en la causa como testigos y, en este sentido, se cita el caso de un exconcejal caído en desgracia ante Ramírez que "está dispuesto a hablar".

El documento se refiere también a los supuestos negocios que serían utilizados como tapadera y para ocultar los ingresos de procedencia irregular, entre ellos, el de venta de obras de arte.

Gran parte de las 25 páginas de que consta el escrito está dedica al exalcalde, al que denomina "Dios" en alusión a su supuesto dominio e influencia