Ángel Aledo, licenciado en Medicina por la Universidad de Murcia, ha conseguido la segunda nota más alta de entre los 13.203 candidatos que se presentaron al examen para obtener una plaza de médico interno residente, el MIR. Tras años de estudio en la carrera y siete meses intensos preparando la prueba, este molinense de 24 años ya descansa satisfecho por lo logrado y su única preocupación ahora es decidir dónde quiere estudiar la especialidad que ha escogido: Neurología.

Ver su nombre el número dos de la enorme lista de candidatos tiene, como poco, que impresionar bastante.

No me lo esperaba, creo que cuando vi la nota me dio la taquicardia más grande de toda mi vida. Cuando metí las claves en el ordenador para saber el resultado estaba en el piso con mis compañeros. Me costó reaccionar, pero enseguida nos dimos todos un abrazo.

¿Cuánto tiempo ha dedicado a preparar este examen?

Pues como en la Universidad de Murcia el sexto curso de la carrera es bastante difícil, solo hemos podido dedicar siete meses a prepararlo. Once amigos nos fuimos a Madrid para estudiar allí.

¿A Madrid?

Sí, nos matriculamos allí en la academia. Podríamos habernos quedado aquí, pero nos apetecía cambiar de aires. Decidimos desconectar y los once nos fuimos a vivir en tres pisos a Madrid en el barrio de Valdebernardo.

Tiene que haber sido una experiencia interesante y, al final, el resultado ha sido bueno.

La verdad es que sí que ha sido una buena experiencia. Entre nosotros tenemos mucha empatía. No es lo mismo contarle a tu madre en casa los problemas que tienes mientras estudias que a un compañero que sabe de lo que estás hablando. La verdad es que en general a los once nos ha ido bien. Nos lo tomamos como un trabajo. Al principio estudiábamos ocho horas diarias y la última etapa hemos llegado a once, pero también hemos descansado y disfrutado de la ciudad.

Con su nota, un 189 sobre 225, no tendrá problemas en elegir ni hospital ni especialidad ¿ha decidido ya?

La especialidad tengo muy claro que será Neurología, lo que estoy ahora decidiendo es dónde. He estado visitando hospitales de Madrid y Barcelona, y también en la Arrixaca y todavía no he tomado una decisión.

Supongo que habrá muchas cosas a tener en cuenta, entre otras, la posibilidad de poder seguir trabajando tras los cuatro años de residencia.

Eso no me lo planteo, lo que realmente estoy buscando es el hospital en el que pueda formarme mejor y también me gustaría que fuera en una ciudad en la que pudiera tener también una experiencia personal nueva.

¿Por qué Neurología?

Porque el cerebro me parece el órgano más interesante y entre las especialidades que se dedican al cerebro la Neurología me daba lo que yo quiero, que es diagnosticar y seguir una relación con el paciente a largo plazo. Además, el futuro de la especialidad me parece apasionante, la medicina en este campo va a avanzar mucho en los próximos años y me emociona saber que voy a ser partícipe de esos avances en enfermedades como el parkinson o el alzheimer.

¿Le gustaría investigar sobre alguna enfermedad en concreto?

No lo tengo claro. En la carrera siempre me ha interesado la epilepsia, pero, por el momento, voy a centrarme en los cuatro años de formación en la especialidad. Lo importante ahora es aprender a ser médico. Lo demás ya lo decidiré después.

¿Qué consejo le daría a un estudiante que esté preparando el examen ahora?

Lo más importante es focalizar. Hay que hacer un gran esfuerzo y a veces puede hacerse cuesta arriba, pero cuando lo has pasado y miras atrás y ves lo que has conseguido da muchísima satisfacción, porque es ahora cuando empieza el mejor momento de tu vida. Esto es muy emocionante, comienzas a sentirte médico y puedes ayudar a la gente que es para lo que has hecho todo el esfuerzo.