­Las temperaturas más altas del año se registraron los días del 25 al 27 de agosto, cuando se alcanzaron máximos absolutos en los observatorios de Murcia y Valencia. En concreto, el 27 de agosto se alcanzaron los 43 grados. El siguiente día más cálido del año fue el 12 de agosto, en el que se alcanzaron 42,9 grados en el aeropuerto de Lanzarote y 42,8 grados en los de Zaragoza y Valencia, según explicó ayer el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Ángel Rivera.

En el lado contrario, el episodio de frío «más importante» se registró entre el 7 el 11 de enero, cuando se produjeron «intensas heladas» que alcanzaron zonas costeras del norte y este peninsular. La temperatura mínima en capitales de provincia fue la registrada en Burgos (Villafría), con -16 grados el 10 de enero, y en Soria, donde el 29 de noviembre se alcanzó el récord absoluto de -9,6 grados.

En cuanto a las lluvias, se generó un superávit durante el invierno, que fue «especialmente húmedo» en el sur peninsular, de modo que en las lluvias durante los tres primeros meses del año alcanzaron el doble de su valor medio. Se convirtió así en el tercer invierno más lluvioso desde 1947. Por contra, julio y agosto fueron «secos», con lo que el superávit se redujo al final del verano.

En general, explicó Rivera, el año 2010, hasta la fecha, ha tenido la temperatura media más baja de los últimos 16 años en España, aunque

acabará con un carácter cálido, ya que la temperatura media anual ha sido 0,42 grados superior a la media anual (15,2 grados) del periodo de referencia (1971-2000).

Así, el portavoz señaló que 2010 ha tenido una temperatura media de 15,66 grados para el conjunto del país y, a 30 de noviembre, está resultando un año «de húmedo a muy húmedo en la mayor parte de España, ya que la precipitación media alcanza los 775 litros por metro cuadrado, es decir, que hay llovido un 29% más del valor normal para este periodo».

Además, apuntó que el periodo julio-agosto tuvo un «carácter extremadamente cálido en la mayor parte de España» y que, con 2 grados más de lo normal, ha sido el segundo más cálido desde 1960.

Por otro lado, Rivera destacó que este otoño ha sido «el más frío» del siglo, después de 2008, con una temperatura trimestral media que se queda 0,2 grados por debajo de su valor medio normal.