Los responsables de una de las entidades financieras que avaló la gestión de Trampolín Hills en la urbanización de Campos del Río se encuentran en prisión. Se trata, en concreto, de las personas que están detrás de Swiss Finantial Corporation S.L., José Manuel Mosquera y José Antonio Alarcón. Su representante legal y cabeza visible, Enrique Martín, fue detenido y puesto en libertad con fianza.

Mosquera y Alarcón fueron detenidos a finales del pasado mes de diciembre en Madrid por agentes de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Murcia y enviados a prisión por la titular del Juzgado Mixto número 2 de Mula, responsable del caso. En los registros practicados, según fuentes próximas a la investigación, los agentes encontraron abundante documentación referida a la constitución de la sociedad. La empresa, que no tenía autorización de la dirección general de Seguros para operar, se creó en Panamá y ha cambiado de sede en numerosas ocasiones, presumiblemente, para dificultar su localización.

Trampolín Hills contrató los servicios de esta sociedad para avalar las cantidades entregadas a cuenta por los compradores de la urbanización que el grupo proyectaba en Campos del Río. El proyecto, que suponía la construcción de cerca de 2.500 viviendas y un campo de golf en el paraje del Barril de Abajo de esta localidad, ha llevado a los responsables de Trampolín Hills, Antonio Martínez y Rafael Aguilera, a tener que responder ante el citado juzgado por un presunto delito de estafa.

Trampolín, según la investigación del órgano judicial y de la Fiscalía Anticorrupción, comenzó a vender las casas en marzo de 2005, antes incluso de tener los permisos para comenzar las obras. Los terrenos, de hecho, estaban todavía calificados como suelo rústico y aún no se había firmado el convenio urbanístico con el municipio.

Según recoge la juez en un auto del pasado 29 de octubre, los responsables de la promotora "desplegaron una amplia campaña publicitaria por Internet y a través de diferentes oficinas e inmobiliarias colaboradoras en España, Gran Bretaña e Irlanda". Cerca de 1.500 compradores entregaron diversas cantidades -algunos, incluso, pagaron íntegros los cerca de 120.000 euros que costaban sus casas- a los promotores. En total, el dinero entregado a cuenta ronda los 50 millones de euros. Sin embargo, casi cinco años después, las viviendas no se han construido. Como consecuencia de esa presunta estafa, la juez impuso una fianza de 30 millones de euros a los responsables de Trampolín.

Esos adelantos, en principio, se consignaban en una cuenta de La Caixa, que avalaba esas cantidades. Tiempo después, sin embargo, Trampolín prescindió de los servicios de La Caixa y contrató a Swiss Finantial. Ese dinero, de momento, no ha podido ser recuperado. Ahora, este chiringuito financiero ficiticio, supuestamente, ha llevado a los responsables de Swiss Finantial a prisión.