Una treintena de provincias de once comunidades autónomas, entre ellas Murcia, están hoy bajo alerta naranja o amarilla debido a la nieve, la lluvia y el viento y, en pocos casos ya, por temperaturas mínimas, que comienzan hoy a recuperarse.

Pese a la progresiva descongelación de los mercurios, el Pirineo oscense registrará hasta menos nueve grados, seis grados bajo cero se podrán alcanzar en Barcelona, Gerona y Lérida, menos siete grados en Albarracín y Jiloca (Teruel) y nueve grados bajo cero en el Pirineo navarro.

La Agencia Estatal de Meteorología ha activado la alerta naranja (riesgo importante) por fuertes nevadas en Burgos, en su zona norte y Meseta, el mismo nivel de peligro en las provincias de Palencia y León, en cuyas áreas montañosos el espesor de la nieve puede llegar a los 25 centímetros.

En Segovia, Soria, Valladolid y Zamora, el nivel de riesgo desciende al amarillo a consecuencia de las nevadas de hasta quince centímetros de acumulación, mientras que en Asturias habrá nevadas importantes en Picos de Europa, la zona central y valles mineros.

Los vientos, con rachas de hasta 70 kilómetros, ha obligado a poner la alerta amarilla en Alicante, Valencia y la Región de Murcia.

El viento, de hasta 80 kilómetros por hora, y la lluvia explican la alerta amarilla en las islas de El Hierro, Gran Canaria, La Palma, Tenerife y la Gomera.

Por último, A Coruña y Pontevedra sufrirán vientos costeros, en Lugo la nieve puede alcanzar un espesor de quince centímetros y en Orense de diez centímetros.