La magistrada presidente del jurado popular, que juzgó hace dos semanas en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Murcia al hombre acusado de matar a su mujer y entregarse posteriormente en la comisaría de El Carmen, ha condenado a José Vicente M.H. a 17 años de prisión por un delito de asesinato.

Igualmente el acusado deberá indemnizar a los tres hijos con 150.000 euros. La sentencia estima la agravante de parentesco y la atenuante de confesión de los hechos, según informaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Murcia.

La semana pasada el jurado popular del juicio declaró culpable de haber matado a su mujer "con conciencia y conocimiento" al acusado, quien en enero del pasado año acabó con la vida de ésta asestándole dos puñaladas con un cuchillo de 13 centímetros de hoja, aunque no se pronunció sobre la posibilidad de indulto.

Durante el juicio, el procesado aseguró que no le clavó el cuchillo ni la tapó con un parasol en el asiento del copiloto, negando la autoría del crimen, y que la razón por la que acudió a Comisaría fue para que lo escoltaran hasta el hospital.

Así, defendió que él no le asestó ninguna de las dos puñaladas en el hemitórax izquierdo ni en la espalda y que las heridas se las hizo ella sola de forma accidental, al caer sobre el arma homicida. El acusado dijo que no observó ninguna herida a su mujer y que comprobó que estaba muerta cuando le fue a dar un beso y ésta cayó sobre su muslo derecho.

Por su parte, la defensa del acusado alegó que éste padece un "trastorno paranoico, celopático y que es drogadicto de larga duración".

Los hechos ocurrieron en enero del pasado año, cuando José Vicente M.H. mató a su mujer, con la que llevaba 38 años casado y tenían tres hijos en común, al negarse ésta a retomar la relación, y llevó su cadáver en coche hasta la Jefatura Superior de la Policía Nacional.

El acusado fue a recoger a su mujer a casa de su hijo, y una vez que ambos ya estaban en el vehículo, comenzaron a hablar sobre su situación personal y la posibilidad de volver juntos, a lo que la mujer se negó.

En ese momento, iniciaron ambos la marcha hacia la autovía para que ésta volviera a casa de su hijo, momento en el que el acusado, tras insistir nuevamente y "contrariado por dicha negativa", cogió un cuchillo que llevaba en el bolsillo lateral de la puerta del conductor, de 13 centímetros de hoja, y "de modo sorpresivo y sin que pudiera ser advertido por la fallecida, le asestó una primera puñalada en el hemitórax izquierdo, que lesionó el pulmón produciéndole una fuerte hemorragia y un 'shock' hipovolémico que le causó la muerte".

La segunda puñalada en la espalda afectó al quinto espacio intercostal de la víctima , que si bien no era mortal de necesidad, coadyuvó a que se produjera el desenlace fatal.