El presidente de Caja Mediterráneo (CAM), Modesto Crespo, afirmó ayer que la entidad se siente "totalmente independiente" a la hora de decidir sobre posibles fusiones e incluso de "valorar como una posibilidad importante el continuar solos en este proceso", aunque, según dijo, "al final" se valorará "entre todos" y se optará "por la mejor decisión para CAM". Crespo y el director general de la caja, Roberto López Abad, atendieron a los medios tras la reunión del consejo de administración y de la asamblea general, acto en el que el presidente reiteró que "por supuesto" que CAM se siente "totalmente independiente" sobre su futuro.