La ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, ha inaugurado hoy el Centro de Transferencia Tecnológica de la Universidad de Murcia (UMU), ubicado en el Parque Tecnológico de Fuente Álamo (PTFA), para el que se han destinado casi dos millones de euros.

Garmendia ha recorrido las instalaciones, donde ha podido escuchar diversos proyectos, como el del catedrático del Departamento de Física y director del Laboratorio de Óptica, Pablo Artal, que ha instalado en el centro una de las sedes de las 13 empresas de base tecnológica (EBT) de la UMU bajo el nombre comercial "Voptica", cuyo objetivo es transferir en España parte de lo que hasta ahora el citado laboratorio ya venía transfiriendo al extranjero.

El arquitecto que ha diseñado el centro, Fulgencio Avilés, ha explicado a Garmendia la singularidad del edificio, con un sistema denominado "Domosec" que está en la vanguardia de los edificios automatizados, ya que monotoriza el balance energético en todo momento, adaptar los parámetros energéticos al nivel de personas que hay en su interior y regular la iluminación según la luz natural.

El rector de la UMU, Antonio Cobacho, remarcó que hoy era un día histórico para la universidad, y destacó que el objetivo es disponer de unas instalaciones que permitan a los grupos de investigación de la universidad desarrollar las actividades de transferencia de tecnología en condiciones óptimas, al situarse en un entorno de empresas tanto con vocación y prestaciones innovadoras, como con necesidades de capacitación tecnológica.

Las instalaciones se destinan a actividades de I+D+i relacionadas con empresas del PTFA o de su entorno, a desarrollar los proyectos de transferencia tecnológica y en especial aquellos que se orienten a convertir los resultados de investigación de los grupos universitarios en productos tecnológicos valorizados, con capacidad para ser asumidos por el mercado, mediante pruebas de concepto, y albergar empresas de base tecnológica universitarias que exploten la oferta tecnológica de la UMU.

El CTT alberga una delegación de la Oficina de Transferencia de Resultados de Investigación (OTRI) de la UMU, que asume la dirección y coordinación del centro, y espacios para la Unidad de Análisis Estratégico de Empresas, así como aulas de formación.

Garmendia afirmó que el centro inaugurado hoy está alienado con el proceso de transformación y modernización en el que está inmerso el sistema universitario español, con el objetivo de situar a las mejores universidades en la élite internacional.

"No es un edificio más; está llamado a convertirse en un elemento nuclear de la actividad universitaria y en un canal privilegiado para la conexión con su entorno mas cercano, con la sociedad, y con la economía murciana y la escena global", añadió.

Recordó que el ministerio ha destinado casi 10 millones de euros en el PTFE desde 2006, y señaló que desde el Centro de Desarrollo en Tecnología de la información (Cedeti) se han financiado 198 proyectos de investigación empresarial y empresas de base tecnológica.

Resaltó el papel catalizador que juega el entorno en el que se ha ubicado este centro, e indicó que desde 2005 el ministerio ha invertido 1.643 millones de euros en estas infraestructuras, frente a los 303 invertidos durante el periodo anterior, y en 2009 se han comprometido una inversión de 442 millones de euros a programas de apoyo a los parques científicos.

Por otra parte, y respecto a la concesión a la UMU de uno de los 26 campus de excelencia del país, fuentes universitarias indicaron a EFE que el proyecto Coriolis galardonado incluye un Centro de Investigación en Alimentos Vegetales y Salud que se construiría costaría unos 4 millones de euros y se ubicaría en Espinardo, próximo al Centro de Edafología y Biología Aplicada del Segura (CEBAS).