Entre 60.000 y 70.000 trabajadores de la Región están sujetos a convenios colectivos que han expirado este año y están pendientes de los acuerdos que mantienen la patronal CEOE y los sindicatos UGT y CC OO. A esta cantidad que hay que sumar otros tantos empleados murcianos cuyos convenios tienen que ser renovados a principios de 2010, según las estimaciones de los secretarios generales de ambas organizaciones en la Región, Antonio Jiménez y Daniel Bueno.

Jiménez y Bueno esperan que el entendimiento con el presidente de la CROEM, Miguel del Toro -que en Murcia nunca ha llegado a romperse, en contra de lo que ha ocurrido en Madrid- permita además reordenar los convenios colectivos que han quedado desfasados o tan dispersos que a veces resulta difícil saber a qué ámbito corresponde una actividad concreta. La mayor dispersión se produce sobre todo en el sector agroalimentario, dado que existe un convenio distinto para la recolección y la manipulación de cada producto que se cultiva en la Región. Como ejemplo, el secretario general de Comisiones Obreras citaba el caso del "peón de labranza, una figura que ya no existe en la actividad agraria, mientras que hay otras categorías profesionales que aún no aparecen".

El desbloqueo de la negociación colectiva es otra de las cuestiones que las organizaciones sindicales quieren incluir en las conversaciones con la CROEM, a pesar de que este aspecto no figura de forma expresa entre los puntos del acuerdo suscrito ayer en la sede de la patronal. En la Región hay en estos momentos unos 70.000 trabajadores con convenios que han vencido este año y no están negociándose a causa del distanciamiento que se ha producido entre las cúpulas nacionales de la patronal y los sindicatos, unos de ámbito estatal (como el de la conserva) y otros de carácter regional (como el de la hostelería). A su vez, en 2010 habrá que empezar a negociar los acuerdos que prescriben a final de este año o principios del próximo. Bueno y Jiménez esperan que el entendimiento en Madrid ayude a salvar las dificultades con las que tropezaba hasta ahora la negociación.

Por su parte, el presidente de CEPYME, Jesús Bárcenas, declaró ayer en Córdoba que "con la deflación que había y como estaba el patio", a los sindicatos "les ha venido bien dejar pasar la negociación para ver si las aguas se calmaban".