El Aurelio Guirao se llenó para escuchar los sones de grandes canciones y villancicos de todos los tiempos.

Juan Muñoz García (1918-1998) fue un vecino de Cieza que dedicó su vida a su familia y a su trabajo. A pesar de las penurias de la época, junto a su mujer, Dolores Campos, supo y pudo sacar adelante a sus dos hijos y aún le quedó tiempo para gozar de su auténtica pasión: la música. De hecho, ni si quiera el servicio militar le apartó de ella, ya que pudo formar parte de la Banda de Música de la Aviación de San Javier en las años 30 en plena contienda civil.

Ya en Cieza, compaginaba su trabajo de maestro albañil con los ensayos de la banda ciezana, especializándose con el saxofón y a las órdenes de los sucesivos directores que tuvo la histórica agrupación musical. Con tan dilatada trayectoria, no podía demorarse más el homenaje de una nueva generación de músicos ciezanos, que este miércoles le dedicaron el tradicional concierto navideño que cada año por estas fechas tiene lugar en el auditorio Aurelio Guirao. Al término, sus dos hijos, Alonso y Pascual Muñoz Campos recogieron una placa conmemorativa.

Casi 400 personas abarrotaron el auditorio para escuchar las obras de Cleto Zabala, Gustav Hobt y Alfred Reed. Y también las músicas de la película Grease o el grupo sueco Abba. Finalizó el concierto, dirigido por el maestro Ginés Martínez Morcillo, con la interpretación de la ´Marcha Radetzky´.

Ricardo Moreno, presidente de la Banda Municipal de Música de Cieza, quiso sumarse al homenaje a Juan Muñoz porque este ciezano "fue un trabajador incansable, amigo y compañero de todos, y llevó la música dentro hasta los últimos momentos de su vida". Moreno recordó que la pretensión sigue siendo la de ir homenajeando a todos los músicos "que pertenecieron e hicieron grande a la banda ciezana desde su fundación en 1924".