El ayuntamiento de Cieza quiere acabar con los robos de fruta en los cultivos, otra lacra a la que los agricultores tienen que enfrentarse cuando llegan estas fechas, por lo que, un año más, blindará sus campos. Y es que cada año, cientos de kilos de fruta acaban en manos de los enemigos de lo ajeno, quienes hacen su agosto vendiéndola a orillas de alguna carretera principalmente cercana a la costa.

Aunque en los últimos años se ha avanzado mucho y los hurtos han disminuido considerablemente, todavía hay quienes desafían al fuerte dispositivo que el Consistorio monta coordinando a la Policía Local y a la Guardia Civil. En esta ocasión no iba a ser menos y las fuerzas del orden rastrearán la huerta en busca de ladrones.

La intención del Consistorio fue expuesta ayer al delegado del Gobierno en Murcia, Antonio Sánchez Solís, en una reunión a la que asistió el alcalde de Cieza, Pascual Lucas, acompañado por el concejal de Agricultura, Antonio Moya. Estuvieron también el capitán del destacamento de la Guardia Civil en Cieza, Pascual Martínez, y su teniente, Gabriel Galván, así como la sargento jefe de la Policía Local de Cieza, María José Hernández. Asimismo. Asistieron representantes de las organizaciones agrarias.

Una de las apuestas de este año es la habilitación de un número único al que los agricultores y ciudadanos en general podrán dirigirse en caso de que sospechen que se está produciendo un robo. Es el 968 01 80 80, que será descolgado por los propios agentes constituyendo un instrumento de comunicación común con la Policía Local y la Guardia Civil. Además, y por primera vez, unidades de los dos cuerpos patrullarán conjuntamente para dar mayor cobertura al dispositivo.

Lucha contra los incendios

Aprovechando la reunión, el alcalde trasladó al delegado del Gobierno la preocupación que existe en el municipio ante la proliferación de incendios sobre todo en los aledaños del río Segura. Los fuegos se inician generalmente en las zonas de cañas y algunos han terminado propagándose a zonas tan emblemáticas como el Menjú o la sierra de la Atalaya.

Al margen de la celeridad que el Ayuntamiento quiere lograr para que la Comunidad Autónoma autorice a Tragsa a proceder al corte de las cañas para evitar estos incendios, el regidor pidió más vigilancia para que se pueda dar con los autores de estos incendios.