Casi 550 años después, la historia se revivió en el municipio de Cieza. 'Por pasar la puente nos dieron la muerte'. Lo reza el escudo de la ciudad y se refiere a los hechos acaecidos en el mes de abril del año 1477, cuando las tropas moras del rey Abu-l-Hassan llegaron a Cieza y, tras cruzar el río, se enzarzaron en una cruenta batalla en la que asesinaron a decenas de vecinos e hicieron rehenes a muchos otros.

Los hechos se rememoran cada año con motivo de las Fiesta del Escudo La Invasión, en las que el municipio está inmerso este fin de semana. Al caer la tarde de ayer, sábado, alrededor de 400 festeros, de ambos bandos, recrearon la cruenta batalla sobre el puente de Hierro y, tras alzarse por el Muro, tomaron la ermita de San Bartolomé. Todo ello adornado con elegantes trajes que confieren a estas fiestas de Moros y Cristianos un color muy especial. Y tras la gran obra de teatro, escenificada en el marco incomparable de la Cieza más antigua, el río y la huerta, los festeros se acomodaron en los campamentos de ambos bandos, instalados en el casco antiguo, para degustar los más exquisitos manjares de antes y de ahora.

Las fiestas continúan hoy, domingo, con un amplio programa de actos, como el pago por la liberación de los rehenes y el homenaje a la Muda (la ciezana que, según cuenta la leyenda, habría hablado milagrosamente para gritar: 'moros vienen'). Ya por la tarde, se llevará a cabo el gran desfile fin de fiestas a partir de las seis.