La Confederación Hidrográfica del Segura ha comenzado los trabajos para eliminar la caña en los cauces del río Segura en unos terrenos de Cieza que abarcan un total de unos 14.000 metros cuadrados. El hecho de cortarla anualmente se ha demostrado que no sirve sino para reforzar su crecimiento, por lo que se están buscando estrategias alternativas y más eficaces de ingeniería ecológica. Así, se emplean métodos como el desbrozado manual o el uso de herbicidas y la quema, y el objetivo ambiental es evitar el fuerte retroceso de la vegetación autóctona debido al crecimiento de esta caña (Arundo donax) invasora.

Tras la plantación de especies autóctonas se llevará a cabo un mantenimiento suave, consistente en desbroces sucesivos de manera cuatrimestral durante cuatro años para agotar las reservas de la caña y darle ventaja a la vegetación autóctona en su competencia con la caña.

Las especies cuya plantación está prevista en estas teselas son las siguientes: Populus alba (chopo o álamo); Salix fragilis (sarga blanca o mimbrera); Salix atrocinerea (sarga negra, bardaguera); Salix neotricha (sarga blanca, mimbrera); Salix purpurea (sarga fina o colorada); Celtis australis (almez); Nerium oleander (baladre, adelfa); Rosa pouzinii, Rosa canina (rosales silvestres); Saccharum ravennae (sin nombre vulgar conocido); Rhamnus alaternus (aladierno); Crataegus monogyna (majuelo).

La actuación en Cieza se encuadra dentro de un proyecto más amplio gracias al que se actuará en 52 tramos independientes más. En concreto, se trata del Proyecto de actuaciones para el control de especies exóticas invasoras (EEIs) no arbóreas y la restauración de los hábitats riparios autóctonos.

Esta actuación es uno de los pilares del proyecto LIFE+ Ripisilvanatura, y se realizará en un tramo del río de una longitud aproximada de 55 kilómetros entre los municipios de Moratalla, Calasparra y Cieza.