La organización ecologista WWF ha reclamado hoy al Gobierno español una participación activa en la reunión de los titulares de Economía del G-20, que se celebra mañana en Londres, para adoptar un acuerdo global sobre cambio climático y diseñar una nueva economía basada en el uso de las energías limpias.

Coincidiendo con la reunión de los ministros de Economía del G-20, esta organización ha remitido una carta a la ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, en la que le pide que el ejecutivo español contribuya activamente a adoptar mecanismos contra el cambio climático.

Para alcanzar este propósito, WWF estima que es necesario que los países ricos movilicen recursos públicos con una cuantía mínima de 160.000 millones de dólares anuales.

Estos recursos deberían destinarse a los países en desarrollo a través de inversiones en energías renovables, eficiencia energética, política de lucha contra la deforestación, nuevas tecnologías respetuosas con el clima y medidas de adaptación.

Esta organización ha reiterado la necesidad de adoptar un compromiso firme en materia de financiación pública antes de 2012, pues es clave para enfocar la inversión privada hacia una economía basada en energías renovables.

WWF ha recomendado a Salgado que apoye la creación de mecanismos de reducción de emisiones destinados a recaudar fondos para los países en vías de desarrollo, como la subasta de derechos de emisión, los mecanismos de los sectores internacionales de la aviación y marítimo y la ampliación de la tasa sobre los créditos de mecanismos de mercado.

A través de la subasta de derechos de emisión, se recaudarían fondos reteniendo y subastando una pequeña parte de los derechos de emisión de los países desarrollados, como aquellos impuestos que reducen las emisiones de gases de efecto invernadero.

Los mecanismos de los sectores internacionales de la aviación y marítimo pretenden abordar las emisiones procedentes de estos sectores, altamente contaminantes, y al mismo tiempo recaudar fondos.

Por último, WWF propone ampliar la tasa sobre los créditos de mecanismos de mercado -que actualmente aplica una tasa del 2 por ciento a los créditos- para aumentar la financiación.