La Junta de Gobierno local aprobó ayer el proyecto de presupuestos municipales para 2018, que pasará por la Comisión de Hacienda y, posteriormente, por el pleno para su debate y votación el día 3 de mayo, para lo cual la alcaldesa, Ana Belén Castejón, se mostró conciliadora con la oposición, que ya se ha pronunciado contraria a las cuentas.

En rueda de prensa, Castejón reveló que en los últimos días está entablando negociaciones con el resto de grupos con la intención de llegar a un acuerdo que permita sacar adelante las cuentas de este año, para lo cual se mostró dispuesta a aceptar «cualquier iniciativa que sea viable económicamente».

Sin embargo, Castejón estableció como «innegociable» la inversión destinada a los presupuestos participativos, así como el gasto social, que aumenta un 8,03%. A su juicio, sería «imperdonable» que se minorara alguna de estas dos partidas.

Tras asegurar que las posturas del equipo de Gobierno no han estado «encorsetadas» o «alejadas» en la negociación con los partidos de la oposición, la regidora ha asegurado que está dispuesta a aceptar «propuestas razonables».

Ante las dudas que plantearon desde la oposición sobre la legalidad de aprobar los presupuestos sin haberse validado antes las cuentas de los organismos autónomos, como Casco Antiguo o la Agencia de Empleo, Castejón anunció que, además de los informes de la Asesoría Jurídica y la Intervención, que dan su visto bueno a este procedimiento, va a solicitar más informes a otras áreas municipales.

Así, los departamentos de Gestión Recaudatoria, Tesorería, Secretaría General y Oficina Presupuestaria, también emitirán dictámenes sobre este asunto, de manera que la tramitación de los presupuestos contará con los mismos informes que ha tenido la propuesta de rebaja de la tarifa del agua para 2018. Desde el PP, su portavoz, Francisco Espejo, recordó que hace más de dos semanas solicitaron ver los informes emitidos al respecto, sin recibir contestación del Gobierno municipal.

De igual forma, Espejo recordó que la alcaldesa sigue haciendo caso omiso al mandato del pleno, que acordó crear una mesa de negociación en el seno de la Comisión de Hacienda para que todos los grupos consensuaran las cuentas de este año. Castejón ya anunció que no iba a cumplir la moción al entender que el presupuesto lo elabora el Ejecutivo local y que si la oposición quiere gobernar y hacer las cuentas del municipio, «que presenten una moción de censura».

199 millones de euros

En cuanto a los números, el presupuesto municipal asciende este año a 199 millones de euros, un 1,78% más que en 2017, cuando llegó hasta los 195,5 millones de euros, destinando a gasto social un 25% del total.

Entre otras cuestiones, el capítulo de inversiones aumenta cerca de 2 millones de euros (un 28,34% más), ya que se destinan 8,68 millones de euros, que se van a financiar con 841.000 euros de la Comunidad Autónoma y la Unión Europea) y con 363.000 euros de las compañías aseguradoras para el servicio contraincendios.

Entre las inversiones presupuestadas destacan 3,5 millones para diversas obras dentro del programa de presupuestos participativos, tales como reordenación del tráfico en diversas calles de El Albujón, obras en el monte de Las Casillas o los campos de fútbol en La Aljorra, La Palma y El Albujón, entre otras; 692.000 euros para obras de infraestructuras en las Juntas Vecinales; y 350.000 euros para mejora y acondicionamiento de la Plaza de la Merced y de la calle de las Beatas.