La restauración del Anfiteatro Romano está ya en su primera fase, que consiste en la consolidación del doble anillo exterior de la plaza de toros y en la excavación de tres estancias, llamadas cárceles, que albergaban los vestuarios de los gladiadores y las cuadras de los animales antes de que salieran a luchar al coso. Las visitas turísticas a estos espacios se podrán hacer durante el periodo de la excavación a partir de finales de mayo.

La consolidación del anillo se está haciendo financiada íntegramente por el Ayuntamiento, que ha aportado 200.000 euros. Las obras, que han comenzado ya, tendrán una duración de tres meses. El andamio, que sustenta actualmente la fachada con grado 3 de protección, será sustituido por un sistema que consolidará esta estructura, de forma mucho más fiable y que permitirá excavar al mismo tiempo. Este proyecto está dirigido por el arquitecto Andrés Cánovas.

Por otra parte, a través de una subvención de 100.000 euros de la Comunidad Autónoma, se han iniciado las primeras excavaciones en las tres estancias situadas en la zona cercana al Pabellón de Autopsias. Se conoce la existencia de estos habitáculos desde el siglo XVIII por una ilustración, y además están confirmadas por las catas realizadas por los arqueólogos. Estos tres espacios se conocían con el nombre de cárceles. Se conoce que una de ellas es más grande que las otras dos (alguna de ellas conservan el techo), e incluso se tiene constancia de la existencia de una escalera bien conservada. Con esta subvención autonómica también se comenzará a trabajar en el Plan Director, que servirá para conocer el valor de las diferentes fases del proyecto y saber la hoja de ruta para trabajar en la puesta en valor de este monumento.

El concejal de Patrimonio, David Martínez, ha explicado que cuando empiecen los trabajos de restauración se colocará el cartel de 'abierto por obras', lo que permitirá visitar el yacimiento en pleno proceso de sacar a la luz estas estancias. Está previsto que los visitantes puedan realizar un circuito en redondo, accediendo por las entradas naturales del Anfiteatro. Por último, el edil ha dicho que este proyecto «va a aportar una solución definitiva, viable y respetuosa, alejada de otras propuestas agresivas de otros tiempos que ponían incluso en peligro los restos romanos del subsuelo».