La recuperación del Anfiteatro Romano empieza a ver la luz. Los operarios ya trabajaban ayer en la consolidación de los muros de la plaza de toros como paso previo a que se puedan iniciar las excavaciones del yacimiento. Se trata de los trabajos conveniados con la Dirección General de Bienes Culturales de la Comunidad Autónoma y que fueron adjudicados a finales del pasado año a la empresa Construcciones María García Martínez.

El proyecto, dirigido por el arquitecto Andrés Cánovas, es una actuación compleja donde se emplea un novedoso sistema diseñado específicamente para permitir la sustentación del doble muro de la plaza y facilitar la intervención arqueológica del Anfiteatro romano que se encuentra en el subsuelo, según indican desde la Concejalía de Cultura, que dirige David Martínez.

Por este motivo, lo primero que se ha llevado a cabo han sido los trabajos previos de seguridad y adaptación del entorno urbano a la obra, entre los que hay que destacar la inhabilitación para el tráfico rodado de la subida Doctor Fleming que discurre entre la plaza de toros y el Hospital de Marina, con el fin de proceder al desmonte de parte de la armadura que compone el andamiaje de sustentación del doble muro que se va a consolidar.

Asimismo se está saneando el muro de la plaza en su tramo superior que presenta zonas muy deterioradas.

Los trabajos tienen una estimación aproximada de tres meses y tendrán su correspondiente seguimiento arqueológico por parte del equipo de directores del Anfiteatro formado por José Pérez, Mari Carmen Berrocal y Francisco Fernández.

Las actuaciones siguientes serán sufragadas a partir de una subvención directa de 100.000 euros procedente de la Comunidad Autónoma que va a permitir la contratación y ejecución del Plan Director, así como la continuación de los trabajos propiamente arqueológicos en el Anfiteatro, que se centrarán en el eje menor meridional, donde se exhumarán una serie de estancias que se conocen por un detallado dibujo anónimo de mediados del siglo XVIII.