Los tres concejales de Ciudadanos, Manuel Padín, Ana Rama y Alfredo Nieto, han inspeccionado las obras que el Ayuntamiento inició en septiembre en el Centro de Acogida y Tratamiento de Animales de Compañía (CATAD) para mejorar el bienestar animal. Los ediles estuvieron acompañados por la concejala responsable de Bienestar Animal, Obdulia Gómez; la jefe de Laboratorio, Nuria Vergara; y el gerente de la perrera, David Cervantes.

Tras la visita, Padín ha informado de que «las obras están paralizadas», y que, a falta de revisar de nuevo el proyecto aprobado, considera que «los nuevos chelines que ya se han construido presentan una serie de deficiencias que no se corresponden con las especificaciones del proyecto que visionamos». «No se adaptan a lo que los animales necesitan, y no solucionan los problemas que ya tenían los de antes», ha explicado, aunque ha reconocido que existe «buena voluntad por parte de la concejala, que en todo momento está controlando que el resultado de estas obras sirva para mejorar el bienestar animal».

El portavoz de la formación naranja ha recordado que una de las razones que llevó a Ciudadanos a presentar una enmienda a los presupuestos de 2017 para adecuar los chelines fue la constatación de que no estaban preparados para proteger del frío y la lluvia a los animales, aunque ha afirmado que «la construcción de los nuevos tampoco consigue esta protección, ya que están abiertos, el suelo del pasillo está inclinado de manera que cuando llueva entrará el agua en los habitáculos y se acumulará la suciedad, y el material del firme no es el adecuado».

Además, ha añadido, los trabajos tendrían que haber terminado en diciembre por lo que se ha incumplido el plazo de ejecución de un proyecto que tenía un presupuesto de 123.000 euros. Por otra parte, a pesar de que una nota del Ayuntamiento informó en septiembre de que se ampliarían los habitáculos y que se dispondría un nuevo sistema de distribución del alimento, «esto no se ha producido», según Padín.

Así, ha anunciado que solicitará de nuevo el visionado del proyecto y una reunión con el director del contrato para confirmar «que las obras no se adaptan a los objetivos del pliego y solicitar las modificaciones pertinentes».