Aunque el Día Mundial de los Humedales se celebra anualmente cada 2 de febrero, fue ayer cuando la ciudad quiso sumarse a esta cita a través de una actividad organizada para concienciar sobre la importancia de este tipo de terrenos para el bienestar del planeta.

Unas 55 personas acudieron a la cita en las lagunas de Cabezo Beaza, entre ellas la edil de Medio Ambiente, Obdulia Gómez, varios expertos, familias con niños y el presidente de Anse, Pedro García.

«A través del recorrido de la ruta ornitológica hemos observado distinas aves con telescopios», una actividad «para la que nos encontramos en una época muy interesante por la gran cantidad de especies que tenemos, como el tarro blanco, el ánade real o la cigüeñuela», entre otras, según explicó el representante de la Asociación de Naturalistas del Sureste.

García añadió que, además de la observación de aves, se participó en un taller de montaje de «cajas-refugio para pequeños murciélagos que pretenden acoger temporalmente a estos animales que se alimentan de los insectos que acuden a la depuradora».