Desde este rincón esperamos que las fiestas de Navidad hayan cumplido las expectativas de todos nuestros lectores y que el Año Nuevo les haya permitido iniciarlo lo más centrados posibles; y no como Rajoy, cuyo subconsciente sigue aún anclado al año 2016. Así mismo, deseamos que los Reyes Magos hayan dejado en todos sus hogares esas dosis tan necesarias de salud, optimismo y esperanza con las que afrontar los retos que asoman por la proa.

A nivel país, en un primer momento, da la sensación de que 2018 no va a depararnos muchas sorpresas; es decir, no habrá cambio alguno en la Constitución de 1978, por la imposibilidad de llegar a un amplio consenso; los independentistas catalanes seguirán a la gresca con el resto de la Nación, mientras se pasean por los juzgados o entran y salen de las cárceles; y la economía seguirá creciendo al 2,3-2,5%, por mal que se hagan las cosas. Por otro lado y también sin sorpresas, además de al incremento de los carburantes, asistimos a la subida del gas un 6,2%, aunque de la botella de butano no tendremos noticias hasta el próximo 16 de enero; a la de la electricidad en un 2,5%, independientemente de ese 10% que ya subió en 2017; a la del teléfono en función de la velocidad en fibra, datos en el móvil y un largo etcétera que dependerá del operador; a la de los peajes de la red de autopistas dependientes del Estado, en un 1,91% ; y para colmo, a la de los sellos, por lo que a todos nos costará un 10% más enviar a nuestros queridos amigos murcianos una postal de felicitación por la llegada del AVE a su ciudad en la primavera o el verano.

A nivel comunitario, además de alegrarnos de que los murcianos lleguen a Madrid en dos horas y media, habrá que congratularse de la eliminación del Impuesto de Sociedades y Donaciones; de que la apertura del Aeropuerto Internacional del Corvera, sea cuando sea, seguro que anda ya más cerca tras su adjudicación a AENA; que el Plan Extraordinario de Inversiones en Carreteras (PIC 2017-2021) haga factible el nuevo eje norte-sur de Murcia; y sobre todo que haya dineros comprometidos para invertir en el Mar Menor: esperemos que técnicos y políticos acierten en ´cómo´ hacer semejante inversión.

A nivel local, es preciso destacar que el billete de transporte público se queda congelado en 1,20 euros; que se dará el pistoletazo de salida al ´Proyecto de ordenanza municipal para accesibilidad universal en el municipio de Cartagena´; que la bajada del recibo del agua será una realidad para las familias de cuatro miembros y un consumo medio de 24 metros cúbicos, lo que les supondrá un ahorro de 8,29 euros. Del resto de infraestructuras que ya quedaron pendientes de ejecución el pasado año, es probable que sigan decorando el cajón de alguien aunque habrá que seguir reivindicándolas pues en España ya se sabe: ´quien no llora, no mama´. Confiemos en que el puerto de Cartagena vuelva a ser el más rentable de España y un motor capital para nuestra ciudad; y que los 108.599 murcianos que siguen en las listas del paro, según el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, las abandonen definitivamente.