Esta semana hago pública mi particular carta a Sus Majestades de Oriente: A nuestros Reyes Magos, esos que vienen en un remolcador para desembarcar en nuestro puerto cartagenero e inundar de alegría y color (solo por un día) el triste 'paseo del muelle', que sigue siendo la vergüenza de la Autoridad Portuaria de Cartagena (APC). El Puerto sigue sin saber qué hacer con esos miles de metros cuadrados asomando al Mediterráneo para sorpresa de los cruceristas y quienes nos visitan, que creían ver un puerto vivo y plagado de restaurantes, bares, tiendas de todo tipo, discotecas, mesones, zona infantil, souvenirs, terrazas chill out, discotecas, salas de juego, etc., etc. Vamos, algo parecido a nuestra vecina Alicante. ¿Tan difícil es copiar lo que funciona bien?

Después de la crítica, vuelvo a la carta a nuestros Reyes Magos que arriban a Cartagena. Son varios los años que venimos pidiendo que intercedan entre el Gobierno central y el de Cartagena, para que no nos den nada que no nos corresponda, pero sí que el reparto para toda la Región sea equitativo y justo. Puestos a pedir, también podemos reclamarles que se asomen a nuestro Ayuntamiento, para decirle a nuestros gobernantes que los cartageneros estamos «¡hartos!» de los odios entre partidos y los malos modales que se han instalado en los plenos municipales; que ya son estériles y da la impresión de que ya no sirven para resolver los problemas que afectan a nuestra ciudad, cuando lo que debía hacerse es gestionarla bien, y buscar nexos de unión donde haga falta, y donde todos debían remar en el mismo sentido: caso de la Zona de Actividades Logísticas de Los Camachos (ZAL), el Corredor Mediterráneo y el AVE. ¡Ah, por cierto! Si podéis, queridos Reyes Magos, decidle a nuestros vecinos de la capital que se queden con el Obispo de Cartagena que vive en Murcia, José Manuel Lorca Planes, que se lo queden ellos, pero que le quiten el nombre de Cartagena a la Diócesis, que aquí no le necesitamos.

Y por último, un año más, desde el Foro Cultural Taurino de Cartagena, pedimos a los tres Reyes Magos que iluminen a nuestra alcaldesa, Ana Belén Castejón, a volver a retomar la posibilidad de dar cabida al capital privado para construir un palacio multiusos para Cartagena a coste cero para las arcas municipales, y así resolver la carencia de ciertos tipos de espectáculos, que aquí no se pueden dar y también solucionar el grave problema para las Fiestas de Cartagineses y Romanos, Carnaval, La Mar de Músicas (entre otros). Del primer intento ya se ocupó hace años la popular Pilar Barreiro. Pero ella sabrá por qué, el coso multiusos no viniera a Cartagena después de anunciarlo a bombo y platillo. Ahí está la maldita hemeroteca para ratificarlo. Ahora, señora Castejón, si me lo permite, lo tiene a huevo en este enero: el mismo empresario parece ser que está dispuesto a sentarse y retomar el tema y ver si se dan las circunstancias propicias para hacer esa inversión de más de 10 millones de euros y más de cien puestos de trabajo. ¡Sea valiente, alcaldesa! Parece ser que la oposición también está por que este proyecto sea una realidad para la ciudad.