La Audiencia Provincial de Murcia ha confirmado la sentencia de un juzgado de lo penal de Cartagena que en mayo pasado condenó a una mujer a nueve meses de prisión al considerar probado que vendió joyas robadas.
La sentencia indica que el juzgado declaró acreditado que la denunciada vendió en dos ocasiones en sendas casas de compraventa de oro alhajas valoradas en 900 euros que procedían de un robo.
La resolución judicial señala que la acusada lo hizo "a sabiendas del origen ilícito de las joyas" y en compañía de una menor que fue condenada por el robo.
En su apelación, la condenada alegó que no se había respetado su derecho a la presunción de inocencia ni demostrado que se lucrara con las ventas, por lo que no había incurrido en el delito de receptación por el que fue condenada, e indicó que guardó en su domicilio la bolsa de la menor en la que se guardaban las alhajas.
