La primera patrona que tuvo Cartagena, la Virgen del Rosell, volvió ayer a salir en procesión por las calles de la ciudad con motivo de su festividad, que tradicionalmente se celebra el segundo domingo de noviembre. La última vez que la imagen recorrió las calles del centro fue en enero de 2015, con motivo de un encuentro de cofradías.

Precisamente, las cuatro cofradías de la Semana Santa de Cartagena llevaron a hombros a la Virgen. Marrajos, californios, hermanos del Resucitado y del Socorro se fueron turnando a lo largo del recorrido, que transcurrió por el entorno de la iglesia de Santa María, desde donde partió la talla. También la acompañaron fieles de otras cofradías de gloria de la ciudad.

El cortejo duró poco más de una hora. Nuestra Señora del Rosell fue llevada a hombros por una veintena de fieles, aunque estuvo arropada por decenas de devotos, que incluso portaron velas en su honor. En la parroquia recordaron que hacía años que la imagen no salía en procesión con motivo de su festividad. Ahora, la fe por la Virgen ha vuelto.

Por eso, avanzaron que, si los fieles quieren, la que fue patrona de Cartagena repetirá procesión el año próximo. La imagen, que siempre lleva una rosa en su mano, lució esta vez una flor de oro, así como su corona ducal y un bastón donado por Juan Carlos I. El trono, que fue cedido por la agrupación california de La Sentencia, iba engalanado con rosas y margaritas.

Hoy, la Corporación municipal cumplirá con su secular voto a los Cuatro Santos de Cartagena por la Borrasca de Santa Catalina, que en 1694 estuvo a punto de arrasar la ciudad. La ofrenda tendrá lugar en el transcurso de la misa que se oficiará en Santa María en honor a la Virgen del Rosell, esta tarde, a las 19.30 horas. La homilía correrá a cargo del vicario Juan Tudela.