A sus 45 años, y tras dos como concejal del Área de Participación Ciudadana y Buen Gobierno, Juan Pedro Torralba fue nombrado el pasado mes de septiembre primer teniente de alcalde tras la destitución de José López de este puesto. Apenas diez después, el 17 del mismo mes, Ana Belén Castejón daba a luz a su segundo hijo y a Torralba le llegaba el turno de regir la ciudad en funciones. Este puesto le ha durado un mes y medio, seis semanas de intenso trabajo a las que se ponen hoy punto final, ya que concluye la baja por maternidad de Castejón y mañana se incorpora de nuevo a la alcaldía.

Un mes y medio puede dar para mucho, ¿qué balance hace de su periodo como alcalde en funciones?

Durante este tiempo he asumido la responsabilidad de intentar cubrir a la alcaldesa en sus actividades y seguir llevando las líneas de trabajo que dejó marcadas junto con el grupo municipal para que Cartagena se viera protegida y para continuar cumpliendo nuestro programa electoral. Se han celebrado dos plenos y tres juntas de gobierno, y aunque todo podría ser mejorable, he intentando atenderlo todo y pienso que hemos estado a la altura.

¿Hacia qué objetivos se ha trabajado durante estas seis semanas?

Llevar la alcaldía implica todas las labores de protocolo con asociaciones y administraciones. En concreto, hemos estado trabajando en el tema del AVE y del Corredor Mediterráneo - a través de la reunión mantenida en Madrid con el ministro de Fomento -, y también destacaría la firma del convenio por el que el Ayuntamiento de Cartagena se ha suscrito a la prórroga del Programa ARRU (Áreas de Regeneración y Rehabilitación Urbana) del Ministerio de Fomento y la Comunidad Autónoma, con el que se destinarán más de 800.000 euros a la remodelación de más de 150 viviendas antiguas.

¿Cómo ha podido compaginar la alcaldía con su cargo de concejal?

Ha sido un trabajo intenso, muchas cosas, prácticamente todos los días desde las ocho de la mañana hasta las diez de la noche. He intentado no apartar mis concejalías de Descentralización y Festejos, sino combinarlo, por eso he echado muchas horas en la calle trabajando. Me gusta mostrarme cercano con la gente y escuchar a los vecinos. Es algo que también caracteriza a la alcaldesa y he querido mantenerlo, por lo que he hecho muchas visitas a barrios y diputaciones, donde trabajamos duro para que ocupen el puesto que merecen en la ciudad.

Uno de sus focos ha sido los barrios. ¿En qué mejoras se ha centrado?

Nos hemos acercado por ejemplo a Los Mateos, cuyo local social ha sido repintado, enlosado y renovado, al igual que el de Lo Campano, cuya instalación eléctrica se ha puesto totalmente nueva. También hemos escuchado las demandas de los vecinos de Santa Lucía, de Pozo Estrecho y de Vista Alegre. En este último barrio, ya se está ejecutando el acceso propio a la guardería, puesto que ya contamos con todos los permisos de la Mancomunidad de los Canales del Taibilla. Igualmente, hemos llevado el seguimiento de las juntas vecinales de La Aljorra y de La Palma, diputación en la que se ha procedido al parcheo de asfalto en las calles que lo requerían.

¿Cómo ha sido la relación con Castejón durante su baja?

La comunicación ha sido diaria y constante, no se ha desentendido para nada durante este tiempo de baja, siempre preocupándose de su familia pero también pendiente de teléfono, WhatsApp e incluso le hemos hecho alguna visita para ponerla al corriente de todo.

¿Qué se va a encontrar la alcaldesa a partir de mañana?

Una de las cosas principales es el tema del mercado de Santa Florentina, que tenía problemas de filtraciones pero creemos que ya se ha subsanado. No obstante, estamos pendientes de las próximas lluvias por si queda algo más que haya que solucionar. Una de las apuestas de la alcaldesa es que el mercado de abastos coja auge y se convierta en un referente para la ciudad, por lo que vamos a seguir trabajando en esa dirección. Esperamos que para Navidad ya estén corregidas todas las deficiencias.