El presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, apeló ayer a «la reflexión y a hacer entre todos un esfuerzo para restablecer un diálogo social con la inmensa mayoría de los catalanes, que quieren seguir perteneciendo a España». Aseguró, a preguntas de los periodistas sobre la situación que el domingo se vivió en Cataluña, que «ayer todos los españoles asistimos atónitos a un espectáculo lamentable y un intento bochornoso de referéndum ilegal, que finalmente no se realizó». López Miras calificó de «farsa» la situación que se dio en el proceso de votación, «donde no había ningún control, sin censo, y donde cada ciudadano podía votar tres y cuatro veces, con urnas opacas y en la calle».

Por su parte, la presidenta de la Asamblea, Rosa Peñalver, mostró ayer, durante los actos organizados por la Policía Nacional en Cartagena para celebrar su patrón, su «agradecimiento y orgullo» por la «actuación ejemplar» de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado (FCSE) durante el referéndum del 1-O en Cataluña. En un discurso pronunciado tras recibir la Asamblea Regional una de las distinciones de la Policía Nacional, Peñalver resaltó que las FCSE han sabido «superar un reto nada fácil». «Hoy pensaba estar y con mucho más orgullo y agradecimiento», apostilló. Así, agregó que quería acompañar a unos «servidores públicos» que garantizan que «nuestros derechos y algo que todos hemos prometido acatar, que es la Constitución española, siga vigente y ellos son los que cuidan que esto pueda ocurrir así».

Precisamente, en la Asamblea Regional, los grupos parlamentarios mostraron ayer su preocupación y tristeza por los hechos ocurridos en Cataluña, al tiempo que apelaron al diálogo para reconducir la situación.

Así, el secretario general y portavoz del PSRM-PSOE, Rafael González Tovar, calificó de «mala noticia» la «fractura de la convivencia» en Cataluña y del Estado de Derecho, así como la «actuación desmedida y no proporcional» de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado para impedir la celebración de la consulta.

Por su parte, su homólogo de Podemos, Óscar Urralburu, se mostró «hondamente preocupado» por la «deriva» del referéndum ilegal, que calificó como «movilización que hay que tener en cuenta».Por ello, exigió al presidente Mariano Rajay que «abra el diálogo negado durante seis años» y «no mire hacia otro lado esperando que la solución sea judicial y represora con jueces y policías», si bien ha considerado que el presidente español no es capaz de liderar la «mirada nueva de país».

Desde la bancada de Ciudadanos, el diputado Miguel Ángel López-Morell señaló al presidente y vicepresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont y Oriol Junqueras, como los «únicos responsables» de los incidentes acaecidos ayer durante un referéndum que «nada tiene que ver con la democracia» y que «está terminando de fracturar a la sociedad catalana». Para López-Morell, los nacionalismos y los populismos son los «principales enemigos» de la Unión Europea, al tiempo que ha abogado por «luchar por un nuevo proyecto de España».

El delegado del Gobierno en la Región, Antonio Sánchez-Solís, consideró «ejemplar» la actuación policial ante el «esperpento» que tuvo lugar este domingo en Cataluña «propiciado por un gobierno independentista, carente del más mínimo principio de legalidad y de las más mínimas garantías para poder llamarlo referéndum».