El pasado jueves 20 de julio en Fuente Álamo se conmemoraba el 'Día de la Villa', es decir, la histórica jornada del año 1700 en la que S.M. el rey Carlos II concedió el villazgo al pueblo y, por tanto, la ansiada independencia municipal de las ciudades de Murcia, Cartagena y Lorca. Para esta ocasión el Pleno Ordinario del Ayuntamiento celebrado el día 28 de junio había aprobado por unanimidad, tras la aprobación del oportuno expediente, nombrar al Excmo. Sr. D. Aniceto Rosique Nieto, Vicealmirante Jefe del Arsenal Militar de Cartagena, Hijo Predilecto de la Villa.

Así pues, a las 21:20 horas, tras el ocaso, daba comienzo frente a la fachada engalanada del Ayuntamiento, en plena plaza de la Constitución, el entrañable acto presidido por D. Antonio Jesús García Conesa, Alcalde de la Villa, que estuvo acompañado en todo momento por la Corporación Municipal. También asistieron al mismo, además de varios centenares de vecinos y amigos, la Excma. Sra. Dña. Belén Castejón, alcaldesa de Cartagena; el Excmo. Sr. D. Salvador Delgado, Almirante Jefe de Apoyo Logístico; el Excmo. Sr. D. Manuel de la Puente, Almirante de Acción Marítima; el Excmo. Sr. D. Andrés F. Gacio, General Jefe de la Fuerza de Protección, los alcaldes de Alhama y de La Unión, el Ilmo. Sr. D. José Luis Carballo, Coronel Jefe del Tercio de Levante y la Banda de Música de Infantería de Marina.

Tras la lectura del acta fue un lujo escuchar el discurso del alcalde, muy aplaudido, pues no solo puso en valor las virtudes del homenajeado y su familia, sino que resaltó el «enorme potencial humano, económico y social de Fuente Álamo, un pueblo que atesora más de 500 años de historia y tres siglos de villazgo». Así mismo, elogió el papel de las Fuerzas Armadas como garantes de la seguridad colectiva de los españoles y de sus derechos.

A continuación llegó la entrega del nombramiento al Almirante Rosique y el emotivo discurso del marino que inició su intervención recordando la figura de Antonio Rosique, su padre, y la persona responsable de haberle educado en los valores que necesita un militar. También resaltó que en estos tiempos en los que las nuevas tecnologías y la globalización son protagonistas indiscutibles, es bueno reflexionar sobre la influencia de las señas de identidad, de «esas raíces que nos impregnan desde muy pequeños, cuando comenzamos a correr por entre las calles del pueblo; cuando tomamos conciencia de la realidad que nos rodea, de sus singularidades; de esas señas que te trasmiten la familia, tus gentes, „tus vecinos„, aderezadas con cariño, solidaridad, amabilidad y un sinfín de valores que, queramos o no, nos acompañan a lo largo de nuestra existencia».

Fue una jornada entrañable en la que los fuentealameros disfrutaron reconociendo la valía de este Almirante que siempre ha paseado con orgullo sus orígenes: se lo dijo al San Pedro en su arenga de la pasada Semana Santa, antes de dejarlo salir a las calle, como le recordó Antonio Jesús.