El Consejo de Administración de Casco Antiguo se reunió ayer para abordar, entre otros asuntos, la necesidad de ampliar la zona de influencia de las subvenciones destinadas a la rehabilitación de edificios incluidos en el Área de Regeneración y Renovación Urbana (ARRU) en la ciudad. Para hacerlo viable, habrá que plantarle a la Comunidad Autónoma (CARM) que dichas actuaciones no se limiten sólo al casco antiguo, como ahora, y que lleguen a la calle Jorge Juan, limitando al sur y norte, con la Rambla de Benipila por un lado, y la Ronda Ciudad de La Unión por el otro.

Asimismo, el gerente de Casco Antiguo, Antonio García, indicó que se contempla incluir el Sector Estación y el barrio de San Ginés dentro de este nuevo ámbito susceptible de obtener subvenciones.

De igual forma, otro de los puntos tratados en la reunión fue el balance de cuentas de 2016, que fueron aprobadas con un beneficio de 216.919 euros, resultado positivo obtenido a pesar de la minoración del valor de 'Cartagena Joven'. Y es que, los integrantes del Consejo de Administración conocieron la reformulación de las cuentas anuales de la sociedad, en las que «se ha modificado a la baja su cuenta de pérdidas y ganancias», tal y como manifestó García, como consecuencia de la reducción del precio de las acciones de la sociedad 'Cartagena Joven', en la que Casco Antiguo tiene participación.

"No se ha llegado al final"

La gerencia continuó dando cuenta de la situación de la sociedad municipal, centrándose en la antigua deuda, de 16.700.000 euros, heredada de anteriores gestores y que, a día de hoy, ha menguado hasta los 11.711.000 euros. «Una disminución de 5 millones de euros que ha sido compatible con la resolución de los importantes frentes que tenía abiertos Casco Antiguo, como la ya finalizada inspección de Hacienda, o los pagos afrontados en los diferentes casos judiciales», según García.

No obstante, desde la gerencia se asume que todavía «no se ha llegado al final». «El camino es difícil pero estamos en el adecuado. Nos ha permitido reducir la deuda por valor de cinco millones, pagar 1,3 millones de euros en revisión de precios de expropiación en los casos judiciales y resolver la inspección de Hacienda», argumentó el responsable de Casco Antiguo.