«Llegado el 31 de agosto, parece que le ponen un candado a La Manga hasta el próximo verano. Los vecinos, sobre todo los jubilados, se encuentran con que apenas disponen de comercios o actividades en invierno en las que poder gastar su merecida pensión. Sólo pueden ver la televisión y pasar frío». Así de rotundo se expresa José García, recién elegido como nuevo presidente del colectivo vecinal de La Manga.

Comenta que existe «un desinterés general» del Gobierno de Cartagena por el municipio costero una vez que acaba el periodo estival: «No se incentiva a los empresarios a que mantengan abiertos sus establecimientos durante la temporada baja. Así, los vecinos que residimos en La Manga nos encontramos con un panorama desolador cuando llega septiembre. No puedes salir un domingo de compras porque, literalmente, no encuentras ningún comercio abierto».

Para García, esta situación afecta sobre todo a jóvenes y personas de la tercera edad: «Los niños y las personas mayores no disponen ni de un abono de transportes para poder desplazarse. En verano, los turistas se suelen quejar de que se colapsa el transporte público, pero durante el resto del año es que ni siquiera funciona de forma eficiente». Añade que «el carril para bicicletas que recorre toda la costa está mal asfaltado y tiene tramos en los que aparece y desaparece como el Guadiana. Circular por él se ha convertido en una carrera de obstáculos, más que en una vía alternativa». Además, sostiene que «tampoco disponemos de una sucursal de la Escuela Oficial de Idiomas que nos permita aprender inglés, que es uno de los idiomas más utilizados en el municipio por la afluencia de turismo extranjero, o mejorar el nivel que ya tenemos» y lamenta la falta de servicios públicos que cubran estas necesidades.

El deporte es otro de los aspectos que se descuida por parte del Gobierno de José López, según García: «Los jóvenes no tienen polideportivos públicos donde practicar deporte porque la mayoría de instalaciones pertenecen a urbanizaciones privadas. En La Manga, desde siempre, existe una gran cantera de atletas, pero no disponen de recintos deportivos donde entrenar y desarrollar su potencial». El dirigente vecinal también lamenta el escaso números de actividades deportivas que se organizan por parte de la administración municipal: «Al igual que en el caso de los polideportivos, apenas contamos con carreras populares o talleres de actividades que fomenten la cultura deportiva». El presidente vecinal ofrece incluso la cesión del local de la Asociación para albergar cursos formativos u otro tipo de eventos para evitar que se convierta en un espacio vacío.

El pasado jueves, durante la toma de posesión de su nuevo cargo, García quiso mostrar su agradecimiento que la junta saliente por su «completa y total» disponibilidad y disposición. Evitó los halagos recibidos y expresó que se trata de «una cuestión de equipo» y como tal, todos deben de «remar en la misma dirección para conseguir mejorar la calidad de vida para los vecinos de La Manga y para sus visitantes durante todo el año, no sólo en verano».