Cámara de Comercio de Cartagena coordina una misión comercial de la Comunidad Autónoma que tiene como principal objetivo explorar las oportunidades de negocio en India como principal potencia y puerta de entrada al mercado del sur de Asia. La visita tendrá lugar a finales de abril para aumentar presencia en países emergentes y con un gran potencial de crecimiento, informó ayer el director del Instituto de Fomento, Javier Celdrán.

En el caso concreto del mercado indio, las ventas de productos murcianos han experimentado un crecimiento del 52,8% en los últimos años, pasando de 52,7 millones de euros en 2010 a 80,6 millones durante 2016.

El número total de empresas que exportaron a la India en el último año fue de 147, mientras que los sectores que más presencia tuvieron en este mercado fueron los de medio ambiente y producción energética, la industria química, la fundición y siderurgia y la industria auxiliar cerámica. La clase media india crece a un ritmo anual de 15 millones de personas que alcanzará los 300 millones en los próximos años y que posee un poder adquisitivo suficientemente alto como para comprar bienes de consumo y mantener hábitos de compra cada vez más similares a los occidentales.

Esta tendencia, unida a otras características socioeconómicas del país como la juventud de su población, cuya edad media es de 27 años, el peso de la agricultura en su economía; el aumento en la renta per cápita de los consumidores; el crecimiento de las ciudades o la presencia en su territorio de importantes compañías tecnológicas y de desarrollo de software, multiplican el potencial de este país que, además, es la principal puerta de entrada a otros mercados del sur e incluso del sureste asiático. La misión que coordina la Cámara de Comercio de Cartagena y que cuenta con financiación del Fondo Europeo para el Desarrollo Regional (Feder).

Entre los sectores con más oportunidades se sitúan el agroalimentario, en especial para los productos hortofrutícolas frescos, los vinos, licores y otros productos alimenticios; el del hábitat, donde destaca la demanda de muebles y de productos de decoración; el de la tecnología agrícola e hídrica; y el de la construcción, entre otros.