«Yo quiero una tele», decía un niño; «yo, cosas de Pinypon», reclamaba una pequeña; otro crío les recordaba a Sus Majestades que había pedido «una Plei». Los Reyes Magos pasaron ayer toda la mañana escuchando las cartas de los niños cartageneros desde la fachada del Palacio Consistorial, donde miles de pequeños acudieron a ver la llegada de los de Oriente.
Como es tradición, Melchor, Gaspar y Baltasar llegaron por mar a la ciudad y nada más desembarcar recibieron una oleada de vítores y aplausos en su recorrido desde el puerto hasta el emblemático edificio modernista, antes de recorrer las calles en procesión.
Además, la animación tampoco faltó con un show en el que se interpretaron numerosas canciones infantiles populares para amenizar la espera por los Magos.
