Andrés Merino, el exsoldado cartagenero de 40 años que durante una semana hizo huelga de hambre ante el Ministerio de Defensa para reclamar una pensión, ha llegado a un acuerdo con el departamento que dirige María Dolores de Cospedal, por lo que ha abandonado su protesta.

Según explicó el propio Merino, el Ministerio le había ofrecido 37.000 euros hasta que el Tribunal Superior de Justicia de Murcia resolviera ciertas aclaraciones que Defensa le había pedido para ejecutar la pensión del exsoldado. Así, éste ha decidido aceptar el dinero. De este modo, Merino abandona definitivamente la protesta frente a la sede de Defensa en Madrid, que inició el 22 de noviembre, para reclamar que el Ministerio le reconociera que su incapacidad deriva de lesiones producidas en acto de servicio por un accidente de tráfico que sufrió cuando estaba desplegado en Afganistán durante el año 2004.

El exmilitar tuvo que interrumpir el martes pasado esta protesta debido a su débil estado de salud tras una semana acampando en plena calle y en huelga de hambre. Fue hospitalizado por orden judicial, pero el miércoles por la tarde anunció que iba a volver a acampar frente al Ministerio. Lo que Merino reclama es que Defensa acate la sentencia que el Tribunal Superior de Justicia de Murcia emitió el pasado 16 de mayo, según la cual la lesión del exsoldado se produjo «con posterioridad a su ingreso en las Fuerzas Armadas y como consecuencia del servicio», por lo que reconoce su derecho a «percibir la pensión que con arreglo a la legislación vigente le corresponde con efectos retroactivos».

Compatible con más ayudas

Según Defensa, el Ministerio acata esta sentencia, pero aún no la ha cumplido porque ha solicitado al tribunal una «aclaración», ya que en la misma no se concreta el grado de incapacidad que se debe aplicar ni la cuantía de la pensión. Además, las fuentes consultadas han remarcado que la indemnización de 37.000 euros es compatible con cualquier tipo de pensión que pueda percibir en el futuro.