«Un comerciante de la calle Medieras tiene los mismos derechos que otro que se encuentra en la calle San Francisco». Este ejemplo, expuesto por la vicealcaldesa y responsable del área de Desarrollo Económico, Ana Belén Castejón, sirve para ilustrar la apuesta de la comisión de evaluación del Plan de Apoyo a la Inversión en el Casco Histórico (PAICA) para ampliar su zona de actuación a todas las calles del centro y permitir a los negocios del área aspirar a las subvenciones municipales.

Así, la comisión iniciará los trámites necesarios para eliminar la delimitación por calles que existe actualmente y que abarcaba las plazas de San Francisco y San Ginés, las calles Honda, San Vicente, Caballero, Cuatro Santos, Arco de la Caridad, Duque, Palas, San Antonio el Pobre, Ignacio García y Balcones Azules; y la zona comprendida dentro de la plaza de la Inmaculada, de las Culturas y El Lago y las calles Gisbert, Don Matías y Don Roque.

Sobre la iniciativa del grupo de trabajo, Castejón explicó que los negocios del casco antiguo «tienen su ámbito de actuación en el centro histórico y deben poder optar a estas subvenciones».

Se trata de una medida que se unirá a la línea de microcréditos que prepara el Ayuntamiento para ayudar a los empresarios y emprendedores en sus negocios. Sobre esta iniciativa, que prevé ofrecer créditos desde 3.000 euros para que los propietarios puedan utilizar ese dinero como un empujón a su empresa en momentos de dificultad, sin verse obligados a cerrar, Castejón explicó que para hablar de la situación del sector hay que valorar también el funcionamiento de «esta línea de microcréditos que vamos a poner en marcha desde el Ayuntamiento». «Precisamente van encaminados a posibilitar que los comercios que pasen dificultades puedan mantenerse», explicó la vicealcaldesa, quien añadió que «es importante que el Ayuntamiento sepa ofrecer esos instrumentos que ojala sirvan para dar oxígeno al sector».

En este sentido, el presidente del Centro Comercial Abierto, Antonio Sánchez, hizo una pequeña radiografía del sector en el centro y explicó que «el comercio que pasa la barrera de los dos años se mantiene; mientras que el que apuesta por una franquicia porque no ha visto otra solución, si no ha acertado, en un año o poco cierra». Para Sánchez, «estamos en una época donde la oferta es ilimitada y poder mantener un comercio abierto es una labor de titanes». Por ello, señaló que «a partir del año que viene tenemos que ver que tendencia toma la actividad económica» y la influencia de las medidas del Ayuntamiento en el sector comercial.

Ayudas concedidas

En la reunión de ayer de la comisión de seguimiento del PAICA también se acordó conceder subvenciones por importe de 30.000 euros a El Viejo Almacén, en la calle Campos; la Venta Abasto, en la calle Honda, y la Farmacia ubicada en el número 1 de la calle Serreta; negocios que recibirán 10.000 euros cada uno a través del acuerdo municipal.

Asimismo, quedó pendiente de aprobación por cuestiones técnicas la concesión de ayudas a dos comercios de moda de las calles San Fernando y Aire.

Estas ayudas se suman a las ya concedidas que supusieron una inversión de 9.700 euros a una tienda de ropa y un centro de estética de la calle San Fernando, a las que se concedieron 3.056 y 6.712,84 euros, respectivamente. Además, a un nuevo local de ocio, pendiente de la aprobación definitiva, también le dio una ayuda de 10.000 euros.

En total, ya son más de 29.700 euros los que se han adjudicado dentro de este paquete de ayudas para dinamizar el casco antiguo y estimular el comercio. Entre ellas hay una panadería, un comercio de ropa, un centro de estética y un local de ocio, situados en las calles San Fernando, Cuatro Santos y San Francisco.

La cuantía de las subvenciones puede alcanzar hasta el 40 % de la inversión a realizar, hasta un máximo de 10.000 euros.