Navantia acogió ayer la presentación de la adaptación del primer motor propulsado tanto por gas natural (GNL) como por diésel para buques de alta velocidad que ha desarrollado la naviera Fred Olsen. El astillero cartagenero llevará a cabo las pruebas de validación de la maquinaria, según el protocolo establecido por la sociedad de clasificación DNV-GL.

En unos días concluirán las pruebas del motor con el Test de Aceptación, que garantizará el funcionamiento seguro y fiable del motor en modo dual, cumpliendo con la normativa técnica y de regulación de emisiones vigente, tal y como indicaron desde la propia compañía.

Los primeros datos, presentados sobre emisiones del motor adaptado confirman una reducción del 90% de óxidos de azufre, así como una reducción de dióxido de carbono y de óxidos de nitrógeno para el funcionamiento en modo dual, con una proporción de 90% de gas natural y 10% de diésel.

Para este proyecto ha habido que adecuar, en base a la legislación aplicable, uno de los bancos de pruebas de motores diésel de Navantia para el funcionamiento seguro con gas natural; instalar el motor convertido a dual en el banco; conectar el nuevo hardware necesario para operar con GNL, su alimentación, monitorización y prosprocesado correspondiente; instalar una planta portátil de suministro de GNL que alimente el motor; realizar los ajustes preliminares y calibraciones; proceder a las pruebas de desarrollo del motor; y, finalmente, realizar las pruebas de aceptación del motor ante la Sociedad de Clasificación DNV-GL.