Nuevo varapalo para los empresarios de Cabo de Palos en general y los propietarios del centro comercial Las Dunas, en particular. Y es que, la anulación Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) deja de nuevo sin fecha la puesta en marcha del proyecto que persigue remodelar las instalaciones comerciales. Así, la decisión tomada por el Tribunal Supremo a raiz de una denuncia interpuesta por el constructor Tomás Olivo al Plan General de 2011, que ha creado la incertidumbre urbanística en el municipio, obliga a retrasar un proyecto que los empresarios llevan esperando 17 años y que contempla reflotar unas instalaciones con 756 locales.
El problema, según explicó el presidente de la comunidad de propietarios de centro comercial, José García, está en que al tumbar el Plan General, el suelo vuelve a tener su catalogación como se uso hotelero, por lo que el proyecto depende ahora de la revisión del planteamiento, tal y como han propuesto los empresarios. No obstante, según revela la web diariodelamanga.com, desde Alcaldía afirman que «hasta que no haya un nuevo Plan no podrán retomarlo».
«El cambio de suelo se produjo de la noche a la mañana por decisión del Gobierno de Pilar Barreiro y sin consultar nada», lamentó García, quien además añadió que «no se contemplaron las indemnizaciones necesarias para los propietarios, ya que con la catalogación del suelo, los negocios habría que derribarlos».
Los empresarios saben que la situación la marca la legalidad, pero aseguran que el Ayuntamiento puede poner en marcha una «modificación puntual» para no retrasar de nuevo la obra. «Es totalmente legal y nos permitiría seguir avanzando y dejar de perder dinero», afirmó el presidente de la comunidad de propietarios.
Sobre el tiempo que el Plan estará sin aprobar definitivamente, García tiene la esperanza de que sea el menor posible, aunque lamentó que «dijeron que las alegaciones empezarían a resolverse este mismo mes y aún no sabemos nada».
Una cuestión de voluntad
No obstante, el empresario afirmó que desde el Gobierno local le han mostrado su voluntad de agilizar todo para que el proyecto se retome, aunque matizó que «habría que volver a presentarlo y que volviera a aprobarse». Y es que, pese a que los documentos recibieron el visto bueno municipal, antes de la sentencia del Supremo, tras el fallo se anuló.
Otro aspecto negativo de la situación es las consecuencias que conllevará este nuevo retraso. García indicó que ya existen varias empresas de reconocimiento nacional e internacional interesadas en instalarse en el centro comercial. Han sonado nombres como McDonald's o Burger King, así como una gasolinera de bajo coste, y varias empresas de restauración.
«Es una cuestión de voluntad política, de hacer las cosas bien para que podamos seguir avanzando en un proyecto que creará puestos de trabajo», añadió García.