­Otro año igual. Así lamentan los vecinos de La Manga las carencias estivales en infraestructuras y servicios que sufren verano tras verano en este privilegiado enclave bañado por el Mar Menor y el Mediterráneo. Atascos, apagones de luz, suciedad en las calles y coches mal estacionados son las principales quejas de los veraneantes. Los residentes afirman que padecen muchos de estos inconvenientes los fines de semana, que son los días de mayor afluencia de gente.

Los vecinos aseguran que la turbidez del Mar Menor y la limitación de acceso de vehículos a motor a Calblanque hace que los primeros kilómetros de playa mediterránea de La Manga, hasta el hotel Galúa, se llenen cada fin de semana de domingueros venidos de poblaciones del litoral donde el baño es de peor calidad. Algo que creen que puede ir a más con la entrada de agosto. Esto también se nota en los chiringuitos del Mediterráneo, que están haciendo mejores cajas respecto a otros años en detrimento de los establecimientos ubicados en el Mar Menor, donde los números no son tan buenos como en estíos anteriores, indican los hosteleros.

Al margen de este problema por plantar una sombrilla en la arena, -los bañistas desvelan que un domingo es casi misión posible cuando otros veranos no era así- los veraneantes sufrieron este sábado noche un apagón de luz que duró casi dos horas. Se produjo sobre las 22.00 horas en diversos puntos de La Manga como las proximidades del Puerto Tomás Maestre y la Plaza Bohemia. Sobre ello, el actor Daniel Albaladejo comentó lo siguiente anteanoche en Twitter: «Apagón en Plaza Bohemia. Hora de la cena con todo a tope. Vaya tela. Hay que pagar el recibo. Haciendo clientela». Los hosteleros de la zona se quejan de que el corte de luz les causó notables pérdidas y perjudicó gravemente su imagen, sobre todo en uno de los días más fuertes del año en cuanto a afluencia de público se refiere.

Restringir el paso de vehículos

La masiva presencia de personas también se nota en los accesos a La Manga, sobre todo los domingos que hay mercadillo en Cabo de Palos. Aunque ayer no se registraron retenciones de consideración, semanas anteriores sí que ha habido colas kilométricas de vehículos que llegaban casi hasta Los Belones. Respecto a los coches, los vecinos denuncian que la presión de vehículos en la Gran Vía es excesiva. Creen que sería bueno que se implantara algún sistema de restricción de acceso de automóviles a La Manga acompañado de un aparcamiento disuasorio en la entrada a la población. Estos vehículos que ´toman´ La Manga también los sufren los propios veraneantes, que se quejan de que no se toman medidas suficientes para sancionar a aquellos conductores que dejan sus vehículos mal estacionados, tapando incluso pasos de peatones. Respecto a la suciedad de las calles, critican que la afluencia de público requiere de mayor esfuerzo por parte de las brigadas de limpieza de ambos municipios.