Santa Ana, en Cartagena, se convirtió este sábado en una gran fiesta con la celebración de la V edición de la Crazy Run. La carrera de pintura fluorescente más divertida del verano llegó a las calles de la localidad que se llenaron de brillo, pintura, música y color al anochecer.

Más de 500 personas disfrutaron de esta carrera apta para todos los públicos y que tuvo muchos alicientes previos y posterior, gracias a la gran labor de la Comisión de Fiestas de Santa Ana, como explicaba su presidenta, Rocío Oncala. "Estamos muy contentos de haber traído esta carrera a la localidad porque ya conocíamos a los organizadores y estamos encantados con ellos, así que no dudamos en elegir la Crazy Run para disfrutar como niños por el formato tan divertido que tiene con la pintura fluorescente y el carácter no competitivo para todos los públicos ".

Desde las 18 de la tarde familias enteras, con sus pequeños, y adultos de todas las edades acudieron a recoger la bolsa de corredor. En ella como explicaba Jessica Escobosa, directora de la carrera, se les entrega todo el material para pasárselo en grande.

"El corredor recibe con su inscripción una mochila, la camiseta, un palo de espuma led y una pulsera luminosa. También tiene la opción de pasar por el taller de camisetas, para personalizarla e inmortalizar su participación en el photocall brillando en la oscuridad".

A las 21.30 comenzaba el calentamiento de la carrera con una clase de zumba con Susana Alarcón y a las 22 horas arrancaba la carrera por 4 kilómetros de la localidad. "Nos lo hemos pasado en grande porque había varios puntos donde nos tiraban pintura y queríamos coleccionar todos los colores, ha sido muy divertido y ahora queremos escuchar a DJ Valdi, de El Hormiguero", comentaban varios jóvenes participantes al terminar la carrera.