Cartagena contará con un nuevo museo en las instalaciones municipales de las Escuelas Graduadas en la calle Gisbert. El alcalde José López anunció ayer durante la firma de cesión del legado de la poetisa María Teresa Cervantes que el Consistorio tiene la intención de convertir este edificio en la sede de la Fundación Carmen Conde. Así, la obra de Cervantes se sumará a la de otros escritores cartageneros como Martín Alpera o Antonio Oliver.

López señaló que el proceso de conversión de las escuelas se efectuará cuando cuente con la dotación presupuestaria necesaria y con un nuevo lugar en el que ubicar los departamentos municipales afincados en el edificio.

En total, 4.000 libros, 200 cuadros y mobiliario forman la donación de Cervantes, incluida la correspondencia epistolar que la poetisa cartagenera mantuvo con autores destacados de la literatura española como Gerardo Diego, Antonio Buero Vallejo o la paisana que da nombre a la fundación, Carmen Conde. López aseguró que recibe el legado «como un honor y como una responsabilidad».

Tras la cesión, la escritora presentó su último libro, La travesía de los sentimientos, un relato intimista y emotivo que evoca al París de Sartre y a la Alemania de la posguerra. López la definió como una mujer «sin vanidad, elegante y abierta», mientras recordaba momentos de su vida en el barrio de Los Dolores con Cervantes como protagonista.

Después de la presentación, la escritora dedicó su libro a los presentes, con quienes compartió impresiones. El regidor, quien conoce a Cervantes desde niño, manifestó su admiración por la escritora y agradeció la cesión ya registrada en el Archivo Municipal de Cartagena hasta que se habilite un sitio concreto para su exposición.