La Policía nacional ha detenido a cuatro personas como presuntos autores de veintisiete delitos contra el patrimonio, tanto en Alicante como en Murcia y Cartagena; localizaban y seleccionaban a víctimas de avanzada edad en entidades bancarias y tras seguirlas, mediante distracción con una muleta - bolsa de la compra, bolso o semejante - perpetraban hurtos de carteras y dispositivos electrónicos.

En el año 2011, la Jefatura Superior de Policía de Murcia llevó a cabo una de las primeras investigaciones sobre un grupo organizado de delincuentes dedicados a la comisión de "simples" hurtos; desde la desarticulación de esta organización criminal de origen búlgaro y asentada en la localidad alicantina de Orihuela se había logrado minimizar la comisión de estos ilícitos penales.

Durante el año 2015 se detectó en tierras murcianas un incremento de esta tipología criminal, robos y hurtos de carteras, lo que motivó el inicio de pesquisas policiales.

La investigación determinó totalidad de cogotazos cometidos tanto en Murcia como en Alicante tenían como autores a dos grupos criminales; uno desarticulado a finales del pasado mes de marzo y al que se le imputaron 52 delitos por hurtos y robos con violencia, por el modus operandi del cogotazo, y otro formado por numerosos integrantes, recientemente detenidos, todos ellos de nacionalidad búlgara.

Aunque no se han obtenido vínculos entre ambas bandas, se ha constatado que los mismos se conocían y ambos tenían residencia en la pedanía de Desamparados, en Orihuela. A partir del operativo policial, que implicó la detención de todos los integrantes del primer grupo, los miembros de esta segunda organización incrementaron sus medidas de seguridad y procedieron a cambiar su residencia a la localidad de Canals (Valencia).

Los investigados seguían manifestando su temor a posibles actuaciones policiales y tenían previsto regresar a su país de origen, Bulgaria, por lo que antes de que abandonaran territorio nacional se procedió a su completa localización y, posteriormente, a su detención.

La intervención policial ha implicado el registro de un domicilio en la localidad de Canals y la intervención de dos vehículos y ropa diversa con la que cometían los cogotazos, 4.000 euros - en euros y en moneda extranjera -, teléfonos móviles, tarjetas bancarias, tarjetas de envío de dinero y otros efectos.

Se continúan las gestiones para la detención del resto de integrantes que forman este grupo criminal con una gran movilidad geográfica.

La laboriosa y ardua investigación ha sido llevada a cabo, de manera conjunta, por la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta de la Jefatura Superior de Policía de la Región de Murcia; por la Unidad de Drogas y Crimen Organizado de Alicante y por el Grupo de Policía Judicial de la Comisaría de Cartagena.