«Si este portavoz desaparece del PP de Cartagena, usted tiene los días contados para ser alcaldesa». Así advirtió ayer en el pleno municipal el concejal del PP Francisco Espejo a la vicealcaldesa Ana Belén Castejón de las posibles consecuencias que la reprobación aprobada ayer sobre el edil popular «por su comportamiento respecto al inicio sin licencia de las obras de su chalé, situado en Cala Flores», según la iniciativa presentada por Movimiento Ciudadano (MC).

Una frase que causó cierto revuelo en el salón plenario y que también tuvo una segunda lectura: que Castejón necesitara los votos de los populares en el supuesto de que el alcalde José López no dimita para que ocupe su puesto la actual vicealcaldesa socialista, tal y como pactaron ambos partidos en junio de 2015, en cuyo caso habría que recurrir a una moción de censura, señalaron desde las filas del PP.

Espejo no quiso confirmar ni desmentir el objetivo de su afirmación y tras el pleno tan sólo dijo que fue «un comentario sin importancia», cuyas interpretaciones «hay que dejar ahí». No obstante, para MC se trató de una «acusación velada», indicaron desde la Alcaldía, desde donde insistieron en que «seguiremos fieles a las promesas y vamos a cumplir el pacto».

Así, la Alcaldía afirmó que «no va con nosotros romper pactos ni mucho menos con el alcalde, que nunca ha roto su palabra. Mientras la lealtad se mantenga, como está siendo hasta ahora, el acuerdo seguirá en pie».

De igual forma, señalaron que «si la intención de Espejo era sembrar la duda, no quedará más que en eso, porque el verano del año que viene se demostrará que López cumple sus promesas» e indicaron que «ya lo dijimos en la campaña y lo seguimos manteniendo: nunca pactaremos con el PP».

Tras debatir la moción sobre la reprobación de Espejo, que el edil popular tachó de «disparate», López ordenó un receso de 20 minutos en el pleno, ya que el cruce de declaraciones entre ambos fue creciendo.

El Gobierno anuncia la disolución inminente del Instituto del Litoral

  • La vicealcaldesa Ana Belén Castejón anunció ayer en el pleno su intención de disolver el Instituto Municipal de Servicios del Litoral (IMSEL) porque es un organismo «poco eficiente y costoso».
  • Castejón explicó que la decisión viene avalada por un informe de la Intervención municipal que señala que es aconsejable la gestión de un modo directo por el Ayuntamiento, por lo que, en las próximas semanas, y cuando haya seguridad de que este cambio no entorpece las tareas de mantenimiento y conservación de las playas, se llevará a pleno la propuesta formal.
  • La vicealcaldesa matizó que con esta medida los trabajadores pasarán a depender del Ayuntamiento y la gestión que hasta ahora venía desarrollando este organismo pasará a depender del Área de Descentralización.
  • Castejón añadió que cuando llegaron al Gobierno en junio de 2015 encontraron «una situación caótica» en el IMSEL, con facturas sin pagar por 90.000 euros de años anteriores y hasta denuncias del Seprona por falta de tratamiento de residuos (algas).
  • El pleno municipal también, junto a otras decisiones, aprobó una declaración institucional por un plan industrial y de futuro para Navantia con el objetivo de que se garantice la estabilidad, la competitividad y la viabilidad del astillero, así como la carga de trabajo y el empleo.