Cultura recibió hace cuatro días parte de la documentación que requirió al ayuntamiento de Cartagena sobre la cubrición de los restos arqueológicos de la plaza de El Lago. El Consistorio envió a la dirección general de Bienes Culturales dos informes sobre cómo se hizo esta actuación, pero no detalló la forma en que se desarrolló el arreglo en superficie, ya que, por ejemplo, en el espacio donde se encontraron cerámicas y restos del área de servicio de una vivienda púnica del siglo III a. C., se acondicionó una jardinera. Por este motivo, Cultura ha vuelto a solicitar al Ayuntamiento el futuro proyecto de remodelación de este espacio para su autorización, ya que se encuentra en el entorno del BIC Palacio de Aguirre.

Asimismo, advierte de que este proyecto «deberá contemplar la conservación visible y visitable de los restos arqueológicos más relevantes documentados durante las excavaciones arqueológicas de 2014 y 2015», señalaron a esta Redacción fuentes de Cultura.

Entre estos restos -calzada romana o Decumano Máximo y una balsa o ninfeo- se encuentran la citada casa púnica, «de excepcional interés», según los propios técnicos de Cultura «ya que son pocas las ocasiones en que es posible alcanzar niveles en tan buen estado y con la suficiente amplitud». La Comunidad ya lamentó hace tres semanas «la oportunidad perdida de continuar con las excavaciones que hubieran permitido estudiar los niveles fundacionales de los Barca».

Además, vuelve a pedir al director de las excavaciones Luis García Blánquez, la memoria arqueológica. Esta documentación servirá para que Cultura complete el expediente informativo abierto al Consistorio por cubrir los citados restos sin autorización de la Comunidad. «El artículo 79 de la ley de Patrimonio habla de reparar y restituir el bien a su forma original. Como no se sabe si ha habido daño, no podemos saber el tipo de sanción que correspondería. Ese es el trabajo que se está haciendo con la apertura del expediente informativo», señaló un portavoz de Cultura. Según el artículo 76 de la citada normativa, en función de si se han producido daños o no, la sanción puede ser de hasta 100.000 euros. En caso de que el Ayuntamiento no aporte la documentación requerida por Cultura en esta segunda ocasión, sí podría iniciarse un procedimiento sancionador.

Cultura recordó que en octubre de 2015 el alcalde José López y la vicealcaldesa Ana Belén Castejón visitaron los restos y manifestaron su interés en seguir con las excavaciones respetando los tiempos de la Semana Santa «para lo que se instalaría una pérgola o piso que lo permita». Asimismo, señaló que el 7 de marzo de 2016 se recibió en Cultura un escrito de la coordinadora municipal de Patrimonio, Carmen Berrocal, quien adjuntó una propuesta de conservación ajustada a la calzada de la plaza, «documento inadecuado para obras realizadas como parte de la intervención en un yacimiento arqueológico catalogado que deben ser autorizadas por la dirección general de Bienes Culturales, según la ley 4/2007, ya que no se trata de medidas urgentes y provisionales de conservación preventiva». El informe constata «la ausencia de previsión municipal» de hacer un proyecto integral de recuperación de la plaza en tiempos próximos.