Las obras de reparación de la estructura del viaducto de la autovía de Murcia (A-30) a su entrada a Cartagena por la avenida Alfonso XIII han quedado aplazadas hasta después de Semana Santa.

Se evita así que los cortes de tráfico que iban a producirse incidan en la llegada de visitantes a la ciudad durante los desfiles pasionales, según fuentes municipales.

El aplazamiento ha sido adoptado por la Demarcación de Carreteras del Estado tras haberlo pedido el alcalde de Cartagena, José López.

Las obras iban a comenzar mañana y a suponer la supresión al tráfico durante dos meses de los dos carriles de entrada a la ciudad por la plaza de Alicante.

Debido a ello, el tráfico se iba a desviar por tres itinerarios alternativos antes de llegar al viaducto: por Torreciega, por la carretera de La Unión hacia la plaza Bastarreche y por el puerto.

La Demarcación de Carreteras, que ya está trabajando en la parte inferior de la vía, iniciará los trabajos en la parte superior unos días después de Semana Santa, cuando se reparará el tablero y los pilares y serán sustituidos los sistemas de contención del puente por otros más resistentes.

Estas operaciones permitirán reparar los daños en el puente, especialmente en el entorno de la antigua fábrica de Potasas y Derivados, debido al efecto negativo que han tenido las emisiones a la atmósfera de esta industria sobre la estructura de la autovía.

La sustitución del sistema de contención (pretil) del viaducto por otro adaptado a la normativa del Ministerio de Fomento de 2014 requerirá el refuerzo de los bordes exteriores del tablero.

Primero habrá que demolerlo parcialmente en una anchura superior a un metro para ejecutar un refuerzo de hormigón armado sobre el que apoyará la nueva barrera de seguridad.

Para poder llevar a cabo estas actuaciones se utilizará maquinaría especializada de alta potencia, que obliga a cortar de forma completa y alternativa la calzada de entrada o de salida a la ciudad.

Estas actuaciones no se pueden llevar a cabo con tráfico por la peligrosidad de una eventual salida de vía de un vehículo, que colisionaría contra las barreras provisionales del borde del tablero y podría dar lugar a una caída con un gran desnivel, circunstancia que se podría agravar porque el viaducto pasa sobre la línea férrea.

Durante la ejecución de las obras, cuya duración estimada es de cuatro meses, se efectuarán cortes de calzada alternativos: durante dos meses, en el sentido de entrada, y durante otros dos, en el de salida.