Aspira a dirigir la cofradía california durante los próximos años y lo hace con ilusión, ganas y proyectos. Pedro Ayala busca recuperar a los jóvenes y mejorar las instalaciones de la hermandad.

¿Cómo ha recibido la noticia de que los mayordomos californios hayan pensado en usted como posible hermano mayor de la cofradía encarnada para los próximos años?

La verdad es que es algo que ya me había planteado hace bastante tiempo. El hermano mayor actual manifestó que no iba a presentarse a las elecciones y un grupo de hermanos pensó en mí y me lo comentó. Lo estuve valorando y creo que es un buen momento para asumir esa responsabilidad con los californios. Ahora el hermano mayor también ha salido en la terna y se presenta, por lo que las urnas decidirán.

¿Qué proyectos tienen en mente para poner en marcha durante sus años de mandato si resulta elegido?

Lo primero es tratar de unir a la cofradía. Estamos divididos y eso se demuestra en los resultados de la terna, donde el actual hermano mayor y yo sacamos casi los mismos votos, lo que refleja, al menos, dos bandos. Hay que tratar de unir a los cofrades. También será un objetivo prioritario el recuperar a los jóvenes en la cofradía. No están bien y eso hay que corregirlo. Mi idea es hacer un grupo de juventud importante y potenciarlo. Será mi primer objetivo.

¿No hay ya un grupo de juventud?

Sí, pero desde hace un tiempo ha disminuido su actividad, y desde la cofradía tenemos que darle un impulso y volver a hacer que los jóvenes se sientan también protagonistas. En los últimos años la juventud se ha disgregado y ya no está como antes. Faltan eventos para dar protagonismo a los jóvenes y ese es nuestro compromiso.

¿Algún otro proyecto a destacar?

También quiero darle un impulso a las edificaciones de la cofradía. Nuestra idea es ampliar algunas dependencias para que sirvan mejor a los procesionistas. Por ejemplo, queremos potenciar Villa Samaritana y Villa Pilatos, mejorarlas. La sede de la cofradía entendemos que está algo anticuada y se ha quedado pequeña. Además, también es mi intención recuperar a los hermanos mayores de la cofradía en una comisión de sabios que pueda aportar ideas y que estén presentes en los actos que llevamos a cabo, como la Salve. Es algo que hacen los marrajos y nosotros tenemos que incorporar porque forman parte de la historia de la cofradía y hay que reconocérselo.

¿Cree que le hacen falta mejoras a la Semana Santa?

La Semana Santa está bien. Aún hay posibilidad de incorporar nuevos tronos, aunque tampoco hay que ampliar las procesiones mucho más, ya que el contenido actual es adecuado. La verdad es que conseguir salir en la época de crisis que hemos vivido y en la que aún estamos inmersos, aunque poco a poco se va superando, es todo un logro para los procesionistas y algo por lo que nos tenemos que sentir orgullosos. Eso y alguna mejoría es lo que nos debe ocupar.

¿Qué destacaría de la Semana Santa y, en concreto, de la cofradía california?

Creo que los californios tenemos una peculiaridad importante: que no tenemos arraigado el sentimiento de cofradía, sino que somos más de agrupación. Es algo que tenemos que cambiar y me comprometo a crear un sentimiento californio que nos defina como tal.