­Hasta cuatro cámaras de televisión situadas en las esquinas del salón de plenos por el propio gabinete de prensa del Ayuntamiento, así como la presencia de televisiones nacionales como La Sexta y La Cuatro ya anticipaban ayer que el último debate de 2015 prometía, sobre todo, después de la marea de críticas que recibió el alcalde de Cartagena José López por insultar al portavoz de Ciudadanos, José Padín, en el pleno de noviembre, momento que fue transmitido a todo el país a través de las cadenas nacionales por un vídeo que montó el Partido Popular.

Al margen del despliegue mediático, la Policía Local contenía desde primera hora de la mañana a un grupo de ciudadanos que aguardaban al pie de la escalera principal del Palacio Consistorial para subir al salón de plenos. Muchos de ellos ya habían sido acreditados para asistir los días anteriores. Sin embargo, la expectación se esfumó con la intervención de López, quien leyó una declaración institucional en la que reconocía que «en momentos puntuales este alcalde se ha alejado de la mesura que se le requiere al presidente de esta sala» y «no es menos cierta que la exacerbación de algunos de los hechos y la manipulación de los mismos han situado a Cartagena en lugares en donde no nos gusta verla».

Con esta intervención, López se retractaba por faltarle el respeto a Padín en el pleno anterior cuando éste dijo: «Voy a ser cortito», a lo que el alcalde le replicó: «Eso ya lo es». Además, el regidor pidió responsabilidad a todos los miembros de la Corporación «para que nuestro servicio a Cartagena y a sus ciudadanos trascienda incluso al uso personal y partidista de cada uno de nosotros». Y señaló: «Que los buenos deseos salten de las pantallas de los móviles para envolver los corazones y conciencias de los que decimos estar al servicio del pueblo».

Sin embargo, no sólo logró zanjar la polémica pidiendo un aplauso para felicitar 2016 a los convecinos presentes, sino que provocó que Padín retirarse la moción de reprobación para echarlo de la Alcaldía, ya que CTSSP no iba a secundar esta iniciativa después del gesto de López; y también otra pendiente desde el último debate en la que exigía la eliminación de la web del Gobierno. «De momento la retiramos para estudiarla más a fondo», dijo Padín.

El portavoz de C´s pidió que se corrigiera el acta del último pleno para que constase que su compañera Ana Rama no abandonó el pleno como ponía el documento, sino que fue desalojada por la Policía Local por orden del alcalde. Sin embargo, el nuevo secretario del Ayuntamiento, Bernardo Muñoz, quien sustituye a Inés Castillo, que se ha prejubilado, señaló que «los funcionarios transcriben las intervenciones de los grupos sin entrar en detalles».

Por otra parte y, tal y como estaba previsto, el Gobierno formado por MC y PSOE, aprobó el presupuesto municipal para 2016 con el apoyo de CTSSP (Podemos), el voto en contra del PP y la abstención de C´s. La edil de Hacienda, Isabel García, indicó que los presupuestos, que ascienden a 188,4 millones de euros, «son los mejores que se podían hacer con un Ayuntamiento intervenido hasta 2022» y que «priorizan el gasto social y las necesidades de los barrios y diputaciones».

El portavoz del PP, Francisco Espejo, pidió disculpas por «romper el clima navideño», echó en cara a la vicealcaldesa Ana Belén Castejón «su nefasta gestión al perder medio millón de euros del SEF regional para los programas de la Agencia de Desarrollo Local y Empleo (ADLE)» y presentó varias enmiendas a las cuentas que fueron rechazadas por el Gobierno, al que el popular calificó de «tripartito». Espejo afirmó: «Quien manda aquí es la señora Marcos -portavoz de Podemos- con un pacto y un Gobierno improvisado y ahora un presupuesto improvisado». De este modo el portavoz del PP mostró el malestar de su grupo porque el Gobierno sólo admitiera las enmiendas de Podemos, que reducen la inversión de 1,3 a 1,1 millones destinando 300.000 euros a partidas sociales como la oficina de desahucios, el pago del recibo de la luz o la reparación de viviendas sociales, entre otras. García le contestó que «no gobierna la señora Marcos, gobernamos con ella porque se puede estar en la oposición y aportar ideas». La aprobación de las cuentas se cerró entre aplausos.