La Armada Española asumió ayer en Cartagena el mando de la fuerza marítima SNMG-1 de la OTAN. La unidad naval se encuentra formada en la actualidad por un buque canadiense, otro portugués y la fragata española Álvaro de Bazán, ésta última capitaneada por el cartagenero José Enrique Delgado, quien será el que lidere la expedición durante los próximos cuatro meses.
Fuentes de Defensa explicaron que los barcos que integran la Agrupación Naval Permanente número 1 de la OTAN (SNMG-1) pueden ir variando en función de las misiones que tenga que desarrollar. Entre esos cometidos se encuentra el de estar listos para intervenir cuando y dónde sea necesario, tal y como explicó el contralmirante portugués Alberto Manuel Silvestre. El luso lideró la SNMG-1 hasta que ayer le pasó el mando a la marina española. Silvestre explicó que el Estado Islámico no está entre las misiones principales de esta fuerza naval, aunque recalcó que «pese a que no estamos involucrados directamente con el Daesh, somos una organización para la defensa que actúa ante cualquier tipo de conflicto cuando se nos requiera».
De este modo, los integrantes de la dotación de la Alianza Atlántica ponen de manifiesto que zarpan desde Cartagena listos incluso para combatir la amenaza yihadista vía marítima. El contralmirante luso tuvo un recuerdo en el discurso que pronunció en acto de cambio de mando que se celebró ayer en el muelle de cruceros del puerto de Cartagena para las víctimas de los atentados de París. Expuso que «el terrorismo está siendo una costumbre en los últimos años, por eso tenemos que distinguir si reaccionar ante su aumento en el modo en que esto afecta a nuestra paz» . El marino portugués destacó que «la obligación de la SNMG-1 es garantizar la seguridad», y afirmó que «estamos trabajando con España desde el 2001 a raíz de los atentados del 11-S en los Estados Unidos». Este trabajo le ha servido a la OTAN, según el militar, para «avanzar con buenos resultados, teniendo así una idea clara de lo que va a ocurrir en el Mediterráneo en nuestra lucha contra el terrorismo».
La SNMG-1 se encarga principalmente de hacer labores de vigilancia costera, rescate, defensa y seguridad de las naciones aliadas. Recientemente acaban de finalizar una campaña en el mar Mediterráneo. En ella, apuntan marineros de la fragata lusa atracada ayer en Cartagena, también se efectuaron labores de vigilancia sobre el apoyo logístico y las vías de financiación que reciben las organizaciones terroristas.
Relevo en casa
El contralmirante cartagenero, José Enrique Delgado, tomó el mando ayer en un acto solemne de relevo que se escenificó en el puerto de la ciudad que le vio nacer. Delgado explicó que navegarán fundamentalmente por el norte de Europa para apoyar a los aliados en el Báltico y en el mar del Norte. La zona de influencia de la SNMG-1 también se extiende hasta el océano Atlántico y el mar Mediterráneo.
