El codirector de las excavaciones del Anfiteatro romano, José Pérez Ballester, quien trabaja junto con la coordinadora municipal de Patrimonio, Carmen Berrocal, en este yacimiento desde hace más de una década, señaló ayer que la primera actuación que se llevará a cabo cuando se inicien las excavaciones en el monumento romano supondrá la demolición de seis metros de la antigua plaza de toros «que están hundiendo los restos romanos que corren peligro». Se trata de la zona por la que ahora se accede al Anfiteatro y que está situada frente al Pabellón de Autopsias, estancia en la que se explicará mediante paneles la excavación. La idea es que se pueda visitar en el primer semestre de 2016».

Ambos se reunieron ayer con el comité de expertos internacionales,con el que se tratará de relanzar el proyecto. Entre los asistentes acudieron el director del Instituto de Patrimonio Histórico del Ministerio, Alfonso Muñoz, así como técnicos de la Comunidad y del Ayuntamiento. «La Comunidad colabora con los trámites y queremos que aporte parte del dinero, aunque pediremos fondos a Europa y el alcalde trata de lograr financiación privada», dijo.