El Ayuntamiento impidió ayer tarde, casi a última hora, que dos nuevas discotecas abrieran sus puertas en la calle Cuatro Santos. Se trata de la sala Coliseum, con capacidad para un centenar de personas, y la discoteca Tántalo.

Coliseum tenía previsto celebrar su inauguración ayer mismo y la Tántalo abrió sus puertas por primera vez el jueves noche. Ambas están a escasos metros la una de la otra. Los dueños de la Coliseum llegaron incluso a recibir el visto bueno de los técnicos municipales por la mañana, pero una notificación in extremis de Urbanismo les dejó sin poder abrir.

La discoteca Tántalo está ubicada en los antiguos juzgados y tiene un aforo para mil personas. Según un comunicado del Gobierno local, el cese de actividad fue ratificada por medio de una orden firmada por el concejal del área de Calidad de Vida, Francisco Calderón, al indicar el Ayuntamiento que la sala carecía de licencia de actividad. El Consistorio explicó que el establecimiento no pudo ser inspeccionado. Una decena de policías locales tomaron la calle Cuatro Santos para notificar ayer a las 18.30 horas a los dueños de los dos negocios, tenían órdenes de precintarlos si abrían.